Huelga agravó mal resultado de pruebas en dos regionales
→ En las direcciones Peninsular y Sulá pasaron 26% y 23% de alumnos, sin curva
En la Dirección Regional de Sulá, en Talamanca, Limón, solo el 23% de los alumnos habría ganado el bachillerato este año de no haberse aplicado la curva de 8 puntos, incluso con la ayuda que otorgó el Ministerio de Educación Pública (MEP), al aumentar a un 60% el valor de la nota de presentación.
Eso significa que, de los 268 jóvenes que se sometieron a las pruebas nacionales, solo 62 pasaron realmente.
Al otro lado del país, en la península de Nicoya, el resultado también fue preocupante: menos del 26% de los jóvenes pasó las evaluaciones sin la curva.
En la Dirección Regional Peninsular, solo 42 estudiantes pasaron, de un total de 163.
Esas fueron las dos zonas con los peores resultados entre las 27 regionales que tiene el MEP.
¿Qué pasó? ¿Qué tienen en común estos sectores? Según los directores regionales, aparte de la lejanía y la falta de servicios, la huelga intensificó las circunstancias difíciles que viven los estudiantes de las zonas Sulá y Peninsular.
En la península, el 99% de los educadores se fue a protesta desde el 10 de setiembre. Los alumnos no volvieron a recibir clases desde entonces. Este lunes, habrán pasado 85 días en esa condición.
“La afectación de la huelga en los colegios fue total. De 600 docentes, el 99% se fue a huelga y no ha regresado. Además, en relación con otras instituciones de la Gran Área Metropolitana (GAM), aquí hay grandes distancias y el acceso a Internet es muy limitado.
”Hemos hecho planes remediales para levantar los resultados de bachillerato, pero los efectos los vamos a ver en un corto plazo”, manifestó Alejandro Rodríguez, encargado de la Dirección Regional Sulá.
Sin preparación. Sonia Salas, responsable de la Dirección Regional Peninsular, coincidió en que la huelga agravó las circunstancias desfavorables.
“Para nadie es un secreto la afectación que produjo el periodo de huelga. En su gran mayoría, los estudiantes no volvieron a clases después del 10 de setiembre. No tengo idea de cómo se prepararon para bachillerato. Aquí los padres son de muy pocos recursos económicos, no pueden pagar un profesor por aparte; no hay academias.
”Aunque no haya huelga o haya huelga, en otros lugares los padres optan por pagar clases extra, aquí no se puede. Aquí es muy alejado, las distancias son muy largas. No es lo mismo aquí que la GAM”, dijo Salas.
Añadió que, a finales de setiembre, hubo una inundación que afectó varios sectores en Puntarenas.
Durante la huelga, contó Salas, algunos alumnos lo que hicieron fue buscar un trabajo para ayudar al hogar. ■