May prepara al Reino Unido para un ‘brexit’ sin acuerdo
→Líder británica hizo el anuncio de forma sorpresiva ante los diputados →Theresa May se alista para cumbre europea convocada para este jueves
LONDRES. AP Y AFP. - La primera ministra británica, Theresa May, aplazó ayer la votación en el Parlamento sobre el brexit, prevista para este martes, con el fin de evitar una esperada y tajante derrota.
En un discurso imprevisto ante la Cámara de los Comunes, May dijo que el Gobierno está acelerando preparativos para una retirada de la Unión Europea (UE), sin acuerdo.
La mandataria explicó que la decisión responde a que el pacto logrado con la UE fue rechazado “por un margen significativo” y sostuvo que, si bien era “el mejor que se pudo negociar”, ahora se prepara para la opción de retiro sin tenerlo.
“Mientras no logremos ratificar un acuerdo, aumenta el peligro de un brexit sin acuerdo” de catastróficas consecuencias para la economía británica, advirtió sobre el escenario que más temen los sectores empresariales británicos, ya que significaría un cambio brutal de las reglas comerciales, sin ningún periodo de transición.
Reacciones. “Este es otro golpe para las compañías desesperadas por encontrar claridad (...). A menos que se llegue a un acuerdo rápidamente, el país corre el riesgo de deslizarse hacia una crisis”, alertó Carolyn Fairbairn, de la patronal CBI.
Entre tanto, en Bruselas, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo que la UE no renegociará la salida británica, y convocó una cumbre para este jueves para tratar el tema.
“No renegociaremos el acuerdo, inclusive el acuerdo de salvaguarda, pero estamos dispuestos a hablar sobre cómo facilitar la ratificación en el Reino Unido (...). Debido a que se nos está acabando el tiempo, también analizaremos la posibilidad de una salida sin acuerdo” , escribió en Twitter.
En Londres, el dirigente opositor laborista, Jeremy Corbyn, manifestó que el aplazamiento de la votación revela que “el Gobierno ha perdido el control de los acontecimientos y ha caído en un desorden total”. Enemigos por doquier. El texto, fruto de 17 meses de duras negociaciones entre Londres y Bruselas, choca con la oposición laborista, los centristas liberaldemócratas, los nacionalistas escoceses, los unionistas norirlandeses del Partido Democrático Unido –en cuyo apoyo se basa la mayoría parlamentaria de May– y hasta de un centenar de conservadores rebeldes, ya sea proeuropeos o euroescépticos.
Su punto más conflictivo es el denominado backstop, un mecanismo ideado para evitar la reinstauración de una frontera dura en la isla de Irlanda, que pueda amenazar el Acuerdo de Paz de 1998, que puso fin a 30 años de sangriento conflicto.
Los defensores del brexit temen que Reino Unido quede atrapado en las redes europeas y presionaron a May a renegociar el backstop en la cumbre de jueves y viernes en Bruselas.
Los laboristas corearon “¡Renuncie, renuncie!”, cuando May finalizó este lunes su discurso.
También, el conservador Jacob Rees-Mogg rechazó el “acuerdo imposible de aprobar” e indicó que allanaba el camino para un gobierno laborista presidido por Corbyn.
Secuelas. El anuncio de May provocó una nueva caída de la liEl
bra. La moneda británica, principal indicador de la confianza de los inversionistas internacionales, cayó 1,7% a $1,2515, su nivel más bajo en 20 meses.
FTSE 100, el índice principal de la Bolsa, bajó 0,5% en el día, reflejando el temor de los inversores de que el impasse político sobre la salida, eleve la posibilidad de un brexit sin acuerdo, en el que sería el peor de los casos, según el Banco de Inglaterra, pues provocaría la peor recesión en un siglo y una nueva caída de la moneda.
Desde que asumió en el 2016, May ha bregado con el brexit, primero, para alcanzar un acuerdo con el bloque, y después para convencer a los escépticos parlamentarios de que lo aprueben antes de la fecha de salida, el 29 de marzo del 2019.
¿Marcha atrás? El máximo tribunal de la UE determinó este lunes que Gran Bretaña puede cambiar de parecer sobre el brexit, dando aire a quienes desean que el país siga en el bloque.
En un nuevo revés para May, la Corte Europea de Justicia puntualizó que, cuando un país miembro de la UE ha notificado sus intenciones de irse, “ese país es libre de revocar unilateralmente esa notificación” .
En el 2016, un 52% de los británicos votó a favor de salir de la Unión Europea, desatando con ello el proceso. Ahora, el tribunal estima que los países podrían cambiar de parecer.
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