Estos artefactos ‘no son inofensivos’
Raul Carvajal, asesor legal del Ministerio de Seguridad Pública, fue enfático en que los rifles de copas como el que provocó el accidente del niño, son artefactos para adultos.
“Esos aparatos, aunque no están impulsados por la deflagración de la pólvora, no son juguetes y eso hay que entenderlo claramente. Distan mucho de ser inofensivos”, dijo.
A pesar de que no son armas de fuego y no se pueden conceptualizar como tal, la adquisición de estos artefactos debe implicar que el comprador tenga al menos 18 años.
Sin embargo, explica, es más por un tema de responsabilidad que por orden de una ley, ya que son de libre venta.
Actualmente, dijo, solo se controla su ingreso al país para determinar que los embarques no traigan armas reales, ya que muchos de estos aparatos tienen gran similitud y se puede prestar para el contrabando.
Para Carvajal, las armas de aire requieren una regulación especial.
Este tipo de artefactos se maneja en tres líneas. Además de los rifles de copas y balines con motivos de caza, también están los artefactos utilizados en tiro olímpico, una modalidad deportiva que se practica a nivel mundial, incluido Costa Rica.
Además, está la modalidad de paintball, un deporte que utiliza estos artefactos para disparar pelotas de pintura, en un ambiente competitivo.
En ambas modalidades, las prevenciones de seguridad son observadas celosamente por sus participantes.
Para él, además de una mejor legislación, la educación y la presencia de adultos son factores esenciales cuando hay niños cerca de estos artefactos.