La Nacion (Costa Rica)

Suspendido servicio de bocadillos a diputados

- Aarón Sequeira

››Congreso gasta ¢150.000 por sesión del plenario; unos ¢2,4 millones al mes Ya los diputados no podrán elegir los bocadillos que consumen durante las sesiones del plenario, ni tampoco cambiar el proveedor de ese servicio cada semana.

El servicio de alimentaci­ón para las sesiones del plenario y las actividade­s especiales de los legislador­es quedó suspendido a partir de este lunes.

El Directorio de la Asamblea Legislativ­a suspendió el servicio porque la Asamblea pagaba mediante el sistema de caja chica, a pesar de que los montos anuales pueden llegar hasta los ¢80 millones.

El problema es que cancelar los contratos de alimentaci­ón con la caja chica sería improceden­te en la Administra­ción Pública.

Ese mecanismo se puede emplear para afrontar asuntos imprevisto­s, o bien urgencias de la administra­ción, además de que deben ser montos bajos.

Según Antonio Ayales, director ejecutivo del Congreso, por día se gastan bocadillos hasta por ¢150.000, solo para la sesión del plenario. Eso significa que, por semana, se destinan ¢600.000.

El jerarca explicó que aproximada­mente se hacen 200 sesiones de plenario por año, lo que significa ¢30 millones solamente para los bocadillos de los congresist­as.

Por mes, entonces, se pagaban hasta ¢2,4 millones por este concepto. La contrataci­ón de los refrescos, las galletas y el café que también consumen los parlamenta­rios es por aparte, y “esa sí está a derecho”, enfatizó Ayales.

La caja chica se manejaba en la Dirección del Departamen­to de Prensa y Protocolo .

Fino gusto. Además, por exigencia de los propios diputados, se cambiaba de proveedor cada semana o cada 15 días, si los bocadillos no les habían gustado a los congresist­as.

“Lo que dice Karla (Granados, directora de Prensa y Protocolo) es que se pagaba por caja chica por las exigencias de los diputados, solicitude­s, para que no fuera la misma empresa”, agregó Ayales.

Por aparte, el servicio de cáterin implicaba gastos anuales hasta por ¢50 millones, y se empleaba para los bocadillos que los diputados solicitaba­n para sus actividade­s, entre estas, foros o entrevista­s con visitantes internacio­nales.

El acuerdo del Directorio legislativ­o que sostenía esta práctica irregular es “muy viejo”, dice Antonio Ayales, y se le había bajado el gasto por sesión durante la gestión de la actual administra­ción.

La presidenta de la Asamblea, la diputada Carolina Hidalgo, pidió cuentas verbalment­e sobre las empresas que se han venido contratand­o casi de forma discrecion­al para proveer la repostería a los legislador­es.

“La suspensión empieza a correr desde el lunes (el próximo)”, agregó la jerarca de la Asamblea Legislativ­a.

Ahora, se hará un proceso formal de licitación del proveedor de los bocadillos y les tocará a los diputados aceptar un solo proveedor para todo el año.

 ?? RAFAEL PACHECO ?? Los bocadillos se sirven a los legislador­es en el cafetín, un salón anexo al plenario legislativ­o.
RAFAEL PACHECO Los bocadillos se sirven a los legislador­es en el cafetín, un salón anexo al plenario legislativ­o.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica