El Paté prueba su primera derrota
›› Morados no hicieron el juego que predica su técnico y cayeron en el Caribe
Perdió muchos balones y le fue difícil recuperarlos, le costó hilvanar pases, la salida desde atrás se volvió un calvario y aunado a eso se mostró débil en defensa.
Saprissa padeció en Limón los males que tanto quiere evitar su técnico y aunque reaccionó en el segundo tiempo, sobre todo en la media, no pudo revertir el marcador.
Los caribeños derrotaron al equipo morado 2-1 en el Juan Gobán, donde fueron superiores en la primera mitad del juego.
En ese lapso Limón le complicó la vida a un once tibaseño completamente nuevo. De los titulares, solo Rubilio Castillo viajó al Caribe e ingresó de cambió y anotó.
Por eso no extraña, o más fácil de comprender, por qué el ideal de Paté sobre el campo estuvo lejos de cumplirse.
Los conceptos de Centeno en definitiva llevan tiempo y a este equipo alternativo le tomó tiempo.
Fue hasta después del minuto 60 cuando empezó a comportarse bajo las reglas de su entrenador.
Incluso Paté cambió un poco el semblante, se notó más tranquilo, porque antes iban y venían las caras de desaprobación por lo visto en cancha.
La S tampoco tuvo suerte y un fallo arbitral le puso el panorama más complicado.
Apenas en el 4’ un penal que no debió cobrarse terminó en gol de Henry Cooper.
El impulso se fue del lado local, y aunque Saprissa se acercó al marco de Dexter Lewis, no fue lo peligroso que hubiera deseado.
Sufrió demasiado cuando intentó armar la jugada desde atrás, como predica Paté Cen- teno, y Limón lo asfixió cada vez que pudo.
En el minuto de hidratación el estratega dejaba claro que no estaba feliz con lo que hacían sus pupilos.
Rándall Leal mostró lo mejor de los tibaseños, pero Limón era el dueño del partido y Cooper tradujo eso en números, con el segundo tanto.
El delantero aprovechó una marca flojísima de Jeikel Medina y quedó frente a Gómez para definir sin problema (37’).
En el descanso llegaron las correcciones moradas y eso se notó. El partido se abrió y se convirtió en tú a tú.
Saprissa se volvió en un rival más peligroso y las variantes hicieron efecto.
Con dos minutos en cancha, el hondureño Rubilio Castillo recordó que es un goleador nato y apareció en el centro del área para empujar al marco un balón suelto, en el 60’.
El reloj estaba del lado morado, pero Limón también supo responder cuando fue dominado. Su fórmula hizo efecto y propinó a Centeno su primera derrota con la S.