Así es la vacuna contra el virus del papiloma que se usará en el país
Gardasil 4 previene contra los dos tipos de VPH más cancerígenos
Muy común. Cerca del 80% de las personas han sufrido una infección por VPH. Casi siempre, el cuerpo la combate y la elimina por sí mismo, el individuo ni se percata de que tuvo una infección, pero a veces se forman lesiones que, con los años y si no se tratan, derivan en cáncer.
Por incidencia y mortalidad, el cáncer de cuello uterino es el que más preocupa a las autoridades de salud pública a nivel mundial.
Datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) indican que durante el 2015 (año más reciente para el que hay datos disponibles) se registraron 372 cánceres in situ (etapa temprana, sin metástasis a otros órganos) y hubo 321 diagnósticos en estado invasor a otras partes el cuerpo. Además, se contabilizaron 143 muertes en el 2017 (último año para el cual hay datos de mortalidad).
¿Cómo infecta el VPH al cérvix? Si una mujer tiene relaciones sexuales con un hombre portador del virus, este lo deja en la vagina. El virus llega al cuello del útero y entra en contacto con las células (usualmente las de la pared). La agresividad, el sistema inmunitario de la mujer y el tipo de actividad sexual podrían determinar si se genera o no una lesión precancerosa que luego pueda desembocar en cáncer.
Protección cuádruple. Costa Rica utilizará la vacuna Gardasil 4, de la casa farmacéu- tica Merck, como parte de su esquema de vacunación. Esta protege contra los tipos 6, 11, 16 y 18 del VPH.
La vacuna funciona con proteínas no infecciosas altamente purificadas, una para cada uno de los cuatro tipos de virus. Esto quiere decir que, en lugar de virus inactivados o “dormidos”, utiliza proteínas generadas por este. Cada uno de los tipos de VPH contiene en su superficie proteínas; entonces, los científicos aíslan las de su interés, las purifican en laboratorio y con esto se obtiene la inoculación.
Estas partículas no son infecciosas porque no tienen el ADN del virus.
¿Cómo funcionan? Las proteínas engañan al sistema inmunitario y le hacen creer que son el virus. Entonces, estimulan una gran producción de anticuerpos. Así, si el organismo tiene futuros encuentros con el VPH, los anticuerpos van a “reconocerlo” y le impedirán infectar a las células.
Este producto se inyecta de forma intramuscular (a través de la piel, en el músculo de la parte superior del brazo). Se pondrán dos dosis, con seis meses de diferencia entre una y otra. El público meta son las niñas de 10 años. Este primer año se inocularían unas 37.000 menores.
Las autoridades de salud buscan que esta vacuna genere protección desde niñas para que ya cuenten con inmunización para el momento en el que comiencen a tener contactos sexuales. La recomendación de la OMS es que se realice entre los nueve y los 10 años.
Aunque la Caja la aplicará únicamente en niñas (dado que son el público que más beneficiado se vería), organismos internacionales indican que sí puede usarse en varones, pues los previene de contagiar a posibles parejas y les evita verrugas genitales, así como la posibilidad de cáncer oral o de ano.
Además, los estudios también demuestran protección contra el VPH en mujeres hasta los 45 años.
Si una mujer de otra edad o un niño quisiera la vacuna, puede aplicársela en un consultorio privado.
“Es importante aclarar que la vacuna no protege contra otras infecciones de transmisión sexual ni tampoco es tratamiento para infecciones ya existentes de VPH o para lesiones producidas por este virus”, enfatizó Alejandro Calderón, médico del Proyecto de Fortalecimiento de la Atención del Cáncer de la CCSS.
Seguridad. Es muy común la pregunta de si la vacuna es o no segura, dado que en Inter-