Negociadores alertan de daño a acuerdos de paz con FARC
Los negociadores del histórico pacto de paz en Colombia alertaron ayer a la ONU sobre un intento del gobierno de Iván Duque de “lesionar gravemente” los acuerdos que pusieron fin al conflicto de medio siglo con la exguerrilla de las FARC.
Los delegados de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del gobierno que presidió Juan Manuel Santos, premio Nobel de Paz, enviaron una carta al secretario general del organismo, Antonio Guterres, en la que cuestionan las objeciones y reformas anunciadas por el mandatario Duque al sistema de Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que juzgará los crímenes más graves cometidos durante el prolongado enfrentamiento.
“Expresamos nuestra profunda preocupación por los intentos de lesionar gravemente la implementación del acuerdo, la estructura y el funcionamiento de la JEP, así como el sistema diseñado para honrar los derechos de las víctimas”, señalaron.
En un mensaje al país, Duque anunció anteayer que objetará ante el Congreso seis de los 159 artículos de la ley que regula la JEP, considerada la columna vertebral del pacto negociado durante cuatro años en La Habana.
Asimismo, anticipó que presentará un proyecto de reforma constitucional para modificar tres puntos del estatuto que dio origen a la justicia de paz y que fue avalado por el Congreso en el 2017 y por la Corte Constitucional, encargada de velar por el cumplimiento de la Carta Magna.
Duque, quien no cuenta con una mayoría asegurada en el Congreso donde deben ser aprobadas sus propuestas, asumió el poder con la promesa de modificar los compromisos de paz por considerarlos indulgentes con exrebeldes de las FARC acusados de graves delitos.
La justicia de paz prevé que guerrilleros y militares que se sometan a su jurisdicción puedan recibir penas alternativas a la prisión a cambio de que confiesen sus crímenes, reparen a las víctimas y nunca más vuelvan a ejercer violencia.
Para los exnegociadores, Duque “persiste en formular nuevos obstáculos, o en intentar revivir debates ya superados” sobre el funcionamiento de la JEP.
La carta dirigida a Antonio Guterres está suscrita por 117 personas, incluidos delegados del gobierno de Santos y de las ya disueltas FARC, además de políticos, académicos y activistas de paz.
Por su lado, el partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) sostuvo que “solicitará de forma inmediata” la intervención del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y de la comunidad internacional para evitar que la paz “sea destrozada” con la determinación de Duque de objetar la ley.
“Con esta decisión que apuñala el corazón del acuerdo de paz, Colombia se convierte en (...) un país sin palabra ni seriedad, que incumple ostentosamente sus obligaciones”, indicó la exguerrilla en un comunicado.