Desconsuelo
Cartaginés entra en zona de clasificación a costa de un agonizante Carmelita
El sufrimiento parece ir incluido en el precio de los boletos que pagan los aficionados de Cartaginés, pero ante Carmelita también se les hizo un cargo adicional sin costo, que les valió para festejar y creer nuevamente.
Hasta los seguidores más escépticos del club de la Vieja Metrópoli deben aceptar que otra vez se ilusionaron y guardan la esperanza de ver a los suyos en la segunda fase. La remontada 2 a 1 les permite pelear hasta el final y abre espacio para dejar atrás cuatro años de frustraciones.
Los blanquiazules vivieron un carrusel de emociones frente a los carmelos. Remaron contra corriente, experimentaron amargura, celebraron y luego tuvieron espacio para la angustia. Todo se generó a causa de un plantel que se cansó de fallar, para triunfar de manera más holgada y llevó al límite la zozobra.
Dejando de lado los sustos, los centenarios sacaron una victoria que los tiene más vivos que nunca, a falta de dos fechas para que cierre del Clausura 2019. Martín Arriola y sus dirigidos se aferran al cuarto lugar que ocupan, aunque Herediano los acosa con los mismos 31 puntos y un partido menos.
Pese a esto, la posibilidad de dejarse un boleto y cortar los ocho torneos que acarrean sin avanzar está más a la mano que en otros instantes. En el recuerdo quedaron los campeonatos en los que llegaron a pelear por la permanencia y estaban muy alejados de todo protagonismo.
Por su parte, en el bando verdolaga pasa todo lo contrario. La preocupación incrementa, ya es más un temor incontrolable el que viven y cada vez es más real la posibilidad de descender, al ser coleros de la general y no salir del hueco profundo en el que cayeron.
Bofetada para despertar. Desgano, apatía o dejadez, todas estas son las palabras que calzan para describir lo que hizo Cartaginés en los primeros 45 minutos. Aunque parezca extraño de entender, el equipo que se juega la clasificación y no tiene margen de error, salió dormido y sin hambre.
No fue hasta en el 45+2 cuando los centenarios salieron del letargo y finalmente despertaron. Marcel Hernández, el único que hasta ese momento mostraba la actitud necesaria, se impuso en las alturas, luego de que Paolo Jiménez se quitara a dos rivales y enviara un centro preciso.
El alma le volvió al cuerpo los presentes en el Fello Meza, quienes no podían creer que su equipo estuviera cayendo desde el 10’, pese a tener un hombre, tras la roja de Jonathan Camio Polenta.
Los verdolagas lograron sorprender con una transición rápida y una definición impecable de Sergio Núñez,quien remató cruzado al palo derecho de Darryl Parker.
Sin embargo, la carga fue muy pesada para un conjunto visitante sumido en problemas críticos de descenso, en la última posición de la acumulada y con 13 compromisos sin ganar (nueve perdidos y cuatro empatados).
De igual forma, parecía imposible que los blanquiazules mostrarán la misma apatía en la etapa complementaria y con tantos elementos a su favor. Apenas en el 51’ golpearon una vez más, para inclinar la balanza de su lado.
Julio Cruz aprovechó una nueva acción a pura velocidad de Jiménez, quien otra vez colocó un envío como con la mano al corazón del área.
Después de esto, los dueños de casa se cansaron de desperdiciar ocasiones. Posibilidades les sobraron, hasta con tres remates al poste, aunque no tuvieron capacidad para definir y evitar el suspenso.
Los de la barriada lo intentaron y pese a sus limitaciones, en el 73’ les faltó poco para empatar, el palo evitó el tanto de Carlos Montenegro.