Líder máximo norcoreano busca el apoyo de Putin
El líder norcoreano Kim Jong-un llegó a Vladivostok para su primera cumbre con Vladimir Putin, la cual espera que sea “útil” y en donde busca el apoyo de Rusia para desbloquear las negociaciones con Washington sobre su programa nuclear.
El encuentro entre ambos será la primera entrevista de Kim con un jefe de Estado extranjero desde que estuvo en Vietnam en febrero, donde celebró una fallida segunda cumbre con Donald Trump.
El famoso tren verde del gobernante llegó a la ciudad de Vladivostok, donde varios hombres con traje se apresuraron a limpiar la puerta antes de que el vagón se detuviera.
Kim, vestido de negro y con un sombrero, caminó en la alfombra roja que le habían preparado en el andén.
Tras una breve ceremonia militar, se fue en una limusina negra protegida por guardaespaldas al son de Katiusha, una conocida canción rusa.
“Espero que esta visita sea exitosa y útil”, dijo Kim, y explicó que quería hablar con Putin de “la manera concreta de resolver la situación en la península coreana”, en declaraciones a la televisión rusa.
En la isla Ruki, frente a la ciudad portuaria de Vladivostok, donde se celebrará la cumbre, se izaron banderas rusas y norcoreanas.
La cumbre empezará con una reunión entre Kim y Putin y luego habrá otra “en formato ampliado”, aunque se desconocen los detalles.
Según los expertos, Kim busca el apoyo de Rusia -su antigua aliada durante la Guerra Fría- en sus negociaciones con Washington sobre el programa nuclear norcoreano.