Humedad exigió a extranjeros en carrera josefina
››Pese a las condiciones, se dejaron todas las distancias en masculino
Una lluvia persistente durante varias horas del sábado y el característico trayecto de la Maratón de San José pusieron a sufrir a los extranjeros que corrieron y dominaron la mayoría de pruebas en la capital.
Este domingo se celebró la tercera edición de la competencia josefina con cerca de 4.000 corredores, de los cuales 212 eran foráneos, aunque no todos élite.
Desde la primera prueba de 5 kilómetros (km) y hasta la distancia madre, de 42 km, reinaron en la mayoría de ellas. Muchos se “quejaron” de la humedad que se toparon sobre el circuito de 10 km y destacaron lo difícil que se hace el terreno, con bajadas y repechos.
Esto último es normal en los recorridos nacionales, pero les pasa factura a quienes no están acostumbrados.
“La ruta es pesada, pero en la última vuelta intenté ponerle ritmo y logré sacar ventaja; la competencia con los rivales fue muy fuerte”, expresó el keniano Elisha Korir, quien reinó en la maratón con un tiempo de 2:28:27.
Para él fue la primera vez en el país, misma situación que la ganadora en femenino, la nigeriana-estadounidense Mary Okor (2:52:40).
Okor tuvo un cierre con la colombiana Briyith Forero, a quien dominó en los últimos metros y le sacó 51 segundos.
“Es una maratón muy bonita, bien organizada, pero no es fácil. La humedad y el calor fueron muy fuertes”, dijo Okor mientras intentaba recuperarse rociándose con agua fría.
Al ser las 8:30 a. m., el sol pegaba fuerte sobre el rostro de los atletas, haciendo el trayecto aún más complicado.
Los africanos tenían el papel de favoritos y cumplieron. Sin embargo, la fiesta no estuvo reservada solo para ellos. También destacaron centroamericanos, una venezolana y hubo espacio para los ticos.
En 21 kilómetros triunfó Édgar Chiroy (Guatemala) con 1:09:07. Él es parte de un grupo de corredores traídos por el equipo nacional Begushi-Coopecaja, que fue protagonista indiscutible de esta edición.
“Me ayudaron a venir, para mí no es fácil porque venimos de una familia con pocas posibilidades económicas. A esto me dedico para mantener a mi familia y estoy muy contento porque no cualquiera te dice que te vengas a correr y te pagan todo”, comentó el chapín de 26 años.
La rama femenina sí fue un podio completo para Costa Rica. Jenny Méndez paró su crono en 1:22:36, le siguió Gabriela Traña con 1:25:04 y cerró Teresita Arguedas con 1:25:36.
El calor de la mañana pesó sobre las piernas del vencedor en 10 kilómetros, el también guatemalteco Mario Sucup, de Begushi.
“Sufrí mucho, el terreno es muy quebrado, pero es un buen recorrido. Esta carrera se está volviendo de prestigio”, mencionó tras 33 minutos y 14 segundos.
Uno de los objetivos de la Maratón de San José es atraer público de afuera, no solo para subir el nivel, sino para promover el turismo deportivo.
Por ahora, aseguran que ese objetivo va por buen camino, pues hubo representación de 28 países y también atletas que le metieron mayor competencia al evento.
Una de ellas fue la venezolana Yolimar Pineda, ganadora de 10 km, con 40:17.
Es una vieja conocida en carreras ticas, pero ahora se ha mantenido durante casi un mes en el país, pues en Venezuela el atletismo también sufre por la situación política y social que atraviesa.
“Antes había carreras todos los fines de semana, pero eso ha cambiado, y aunque algunos eventos se hacen, no corremos porque la premiación no es buena”, comentó la maratonista olímpica de Londres 2012 y Río 2016.
Finalmente, los 5 km quedaron en manos de la nacional Julay Gamboa (17:17), y en hombres venció el nicaragüense Róger Castellón, también de Begushi. Fue como aprender a caminar de nuevo y luego correr hasta cruzar la meta de su primera media maratón después de casi tres años de una grave lesión.
El atleta de antaño Roy Cachorro Vargas completó este domingo los 21 kilómetros de la Maratón de San José.
Pudo ser una competencia más en su extenso y glorioso currículo sobre el asfalto, pero no... Tiene una historia especial.
En setiembre del 2016 se fracturó la rodilla derecha, lo que requirió cirugía y la colocación de tres pines; se lesionó mientras caminaba y tuvo que empezar un proceso largo de recuperación.
En ese entonces, el pronóstico médico era que no iba a volver a correr o, al menos, que era muy complicado. Pero él nunca lo creyó así.
Poco a poco, el alajuelense rompió con esa idea y un año más tarde hizo 10 kilómetros en la competencia del Colypro.
No contento con eso, siguió con su pasión y se propuso volver a una media maratón. “Estoy muy agradecido con Dios, mi familia y todas las personas que me apoyan, porque no ha sido fácil. Hoy (ayer domingo) es el primer día que corro 21 kilómetros desde la lesión, pero me sentí bastante bien”, contó.
“Ahora es como volver a empezar, al principio da mucho miedo, porque ando corriendo con tornillos”, agregó el atleta.