Cartaginés pudo haber sumado 3 cetros y frenar el ‘hexa’ del Saprissa
Cartaginés debió salir campeón en los torneos de 1975, 1976 y 1977, cuando el monarca fue el Deportivo Saprissa y esos certámenes representaron los trofeos cuatro, cinco y seis de su mítico hexacampeonato.
En 1975, había 9 clubes con una primera fase de todos contra todos, la cual ganó Alajuelense con 24 puntos. Después, una segunda etapa con solo un enfrentamiento entre cada equipo, que terminó con Cartaginés primero con 13 unidades y la última fase fue una cuadrangular en la que Saprissa y los brumosos consiguieron ocho puntos, pero los morados terminaron victoriosos gracias al gol diferencia.
Si se hubiera tomado en cuenta las tres fases del campeonato, Cartaginés hubiera sido primero con 43 puntos, seguido por Alajuelense con 42 y Saprissa con 41.
“Este ejemplo es muy cierto, Cartaginés gana la primera fase y en el puntaje general. Llegan a una cuadrangular final y lo increíble de ese campeonato es que el que ganaba la cuadrangular era campeón, sin derecho a jugar una final”, detalló Gerardo Coto Cover, estadígrafo nacional.
Para 1976, la situación fue similar, pues se jugó una primera ronda a tres vueltas, todos contra todos, ganada por los blanquiazules con 42 puntos, seguidos por el Deportivo México con 37 y Saprissa con 31.
Después se jugó una pentagonal y los tibaseños se dejaron el cetro al imponerse con 12 unidades. Si se hubiera sumado las dos fases los de la Vieja Metrópoli hubieran hecho 50 puntos, el Deportivo México 47 y Saprissa 43.
La misma historia pasó en 1977, cuando se jugó una primera fase de 40 partidos que ganaron los paperos con 56 puntos, pero en la pentagonal volvieron a flaquear y Saprissa ganó esa etapa con 13 unidades. El balance de las dos rondas terminó en pro del Cartaginés 64-63 sobre la S.
Esa vez, sí hubo una final, pero los morados volvieron a amargar el sueño del equipo brumoso.
Lo curioso de este ejercicio es que el hexacampeonato morado debió llegar antes a las vitrinas del club tibaseño.
Saprissa fue campeón en 1964 y 1965, después Alajuelense ganó el del 1966 y el Monstruo se dejó los trofeos de 1967, 1968 y 1969, pero el que se ‘robaron’ los manudos debió ser morado.
En esa oportunidad, ambos quedaron con 49 puntos tras 36 jornadas, pero los tibaseños tenían un mejor gol diferencia (42 a 41), pero este criterio no regía en ese entonces. Por lo tanto se jugó una final y ganó la Liga.