Tía Florita: ‘Cada uno en su casa y Dios en la de todos’
seguir haciendo, se va recortando porque el organismo no te deja seguir como antes, pero yo sigo con mi trabajo exactamente igual, como cuando empecé en la televisión (hace 45 años). Yo cumplo con mis patrocinadores y con todos por igual.
”Sí me canso de estar de pie, entonces hago mis cortes (de las grabaciones), me siento y descanso unos minutos; pero después me levanto con la ilusión de seguir siendo útil y activa. Eso me hace feliz y mis hijos se sienten orgullosos, pero eso se lo debo a Dios y al Espíritu Santo, en quien creo ciegamente porque siempre me cuida”.
––Y eso hay que celebrarlo, supongo. ¿Cómo festejará Tía Florita este cumpleaños? —Recibimos este año muy agradecidos con Dios y orando más de la cuenta porque siempre se ora por la familia y por todo, pero no estamos con espíritu para celebrar. Los mismos nietos le insisten a uno de que no hay que salir de casa, entonces será mejor cada uno en su casa y Dios en la de todos. Sí hay felicidad porque la mamá y la abuelita llega a los 93 años, pero definitivamente hubo un cambio: es muy triste esto que nos está pasando (la pandemia del covid-19) y que nos afecta a todos. Esto (lo del coronavirus) no es un dolor exclusivo de nuestras casas ni de nuestras familias, es un dolor nacional y de todo el mundo.
––¿Alguna vez tuvo que cancelar o no realizar una celebración de cumpleaños como medida preventiva de algo? —Hasta donde recuerdo no.
Pero es que ahora uno recibe tanto cariño de la gente a través de Facebook. ¡Ya me están felicitando! Tengo una página con más de 350 mil seguidores y en agradecimiento por ese cariño les comparto diariamente, desde hace seis meses, recetas para que se entretengan haciéndolas en casa. Les regalo una receta todos los días porque yo colaboro con lo que sé. Todas esas personas saben de mi cumpleaños y desde ahí me envían mensajes tan lindos que yo les agradezco por tanto cariño.
––¿Le ha cambiado algo de su rutina esta pandemia?
—La gente mayor es una de las poblaciones más delicadas, yo no he tenido mayores cambios porque las recomendaciones de las autoridades son cosas que yo aprendí a aplicar desde
––El frenar la expansión de este virus es una responsabilidad de todos, ¿qué le dice usted a los costarricenses frente a esta emergencia sanitaria? —Desde el momento que estalló esto, lo único que les dije fue que tuvieran calma porque no sabíamos lo que se venía. Ahora les digo calma y orden. Hay que obedecer y estar unidos como país; solo así, unidos y pidiéndole a Dios, es que vamos a salir de esto. El país, el mundo entero, tiene que ser organizado para luchar, vencer y salir de esta pandemia.
”Llevamos dos muertes (hasta el viernes a las 6 p. m.) de gente ya grande, pero yo en los que más pienso son en los niños. Los viejitos si nos vamos es lo lógico porque, de todas maneras, nos vamos a ir por la edad y hasta en eso creo que Dios nos protege, pero un niño sería bastante doloroso”.
––¿Qué proyectos tiene usted para los próximos años?
—No hay planes de proyectos profesionales. Esto (lo del coronavirus) me tiene un poquito pensativa, no deprimida, pero sí pienso en el gran cambio que habrá más adelante. Solo nos queda pedirle a Dios que no sea un caos y que, aunque sea despacito, se vuelva a normalizar el país, pero ahorita no hay tiempo para pensar en planes.