134 contagiados; virus llegó a las siete provincias
Nueve enfermos distribuidos en cinco hospitales públicos; tres delicados
La cifra de contagios confirmados de covid-19 en Costa Rica ascendió ayer a 134, en momentos en que la enfermedad ya llegó a todas las provincias y ha enviado pacientes a cinco hospitales.
El Ministerio de Salud confirmó la estadística en una conferencia virtual donde explicó que de sábado a domingo el conteo sumó 17 nuevos casos (hasta el sábado eran 117) y se descartaron otros 1.400, es decir, 210 más respecto al día anterior.
Los afectados se distribuyen en 55 mujeres y 79 hombres con edades entre 2 y 87 años, entre ellos, 14 adultos mayores y 7 menores de edad, explicó Daniel Salas, ministro de Salud.
De ese total, nueve están internados en hospitales y tres de ellos en unidades de cuidados intensivos.
Hasta este domingo se logró detectar un enfermo en Coto Brus, Puntarenas; esta era la única provincia a la que no había llegado el coronavirus, desde el 6 de marzo anterior, cuando se confirmó la primera paciente, una turista estadounidense.
A la fecha, Costa Rica reporta dos muertos por el mal, cuyos contagios en el mundo superan los 335.000 y 14.000 fallecidos, principalmente entre Italia, China, España, Irán, Francia y EE. UU.
El recuento costarricense lo presentó Salas, junto a Román Macaya, presidente de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Luis Fernando Porras, gerente de Logística de esa entidad y Rodrigo Marín, director de Vigilancia de la Salud.
Macaya precisó que los nueve pacientes internados se distribuyen así: el Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia atiende uno; hay cinco en el Hospital de Alajuela, uno en el Hospital México, otro en el Hospital Calderón Guardia y el último en el Hospital Max Peralta de Cartago.
El jerarca de la CCSS recordó que las acciones ejecutadas persiguen cuidar a los adultos mayores y personas con factores de riesgo (presión alta, diabetes, asma, cáncer, fumadores u otras condiciones de salud).
“Esas personas deben estar en el máximo aislamiento posible. Eso significa para los adultos mayores que su familia los atienda pero sin acercarse. Si viven solos, déjelos en su casa y esté pendiente de ellos por el celular o, al llevarles comida, no vaya a acompañarlos físicamente; eso es algo esencial”, explicó.
La actualización de casos llega a pocos días de que se paralizaran actividades masivas, el curso lectivo, el ingreso de extranjeros al país; se cerraran bares, discotecas y cualquier centro de reunión público, incluidos parques y playas.
Sigue contenida. Cumplidos 18 días desde los primeros
pacientes confirmados, Costa Rica aún mantiene seis clusters o conglomerados de casos donde se conoce claramente el origen de casi todos.
Esto permite contener mejor la enfermedad y evitar mayores transmisiones.
Con base en los últimos datos, no puede confirmarse que haya transmisión comunitaria activa de la enfermedad porque, aunque las autoridades buscan activamente casos, todavía no han comprobado que el virus se transmita de forma más frecuente y activa entre personas como para volver imposible determinar el vínculo de contagio para cada una.
La transmisión comunitaria sí se comprobaría de aparecer casos donde se trata de personas que no hayan viajado al extranjero recientemente y sin contacto con personas ya calificadas como sospechosas o confirmadas.
Aún así, esta fase de transmisión sí podría llegar.
Durante la conferencia de prensa, Rodrigo Marín, director de Vigilancia de la Salud del Ministerio de Salud, señaló que entre los 17 nuevos casos a este día, algunos permanecen en investigación y en búsqueda de ese nexo de origen.
Si no se logra determinar ese nexo, ello podría ser indicativo de transmisión en la comunidad. De darse eso, la enfermedad entraría posiblemente en una fase de contagio más activa y veloz.
Esto explica porque la insistencia de las autoridades a mantenerse en casa, salir únicamente por razones necesarias (compras de suministros para el hogar, por ejemplo) e higiene constante.
Guardia arriba. “Siento que estamos respondiendo aunque hay reportes de cantones donde aún se ve movilización de personas. Lo del toque de queda, insisto, no existe en nuestro país y la cuarentena obligatoria podría ser una situación que podríamos usar solo si fuera necesario”, agregó Salas.
El jerarca de Salud indicó que ese tipo de medidas tan fuertes podrían atrasar la recuperación económica del país. Además, recordó que poner a una nación en pausa no elimina el virus.
“Al final la curva se dará en algún momento, pero la responsabilidad de todos permitirá que no haya una repercusión muy fuerte”, explicó.
Salas agregó que siguen haciéndose 150 pruebas de laboratorio diarias con actualizaciones cada 24 horas, detalle que representa aún el límite máximo de exámenes por día.
El ministro aclaró que las personas deben evitar las aglomeraciones, pero sí motivó a quienes puedan hacer ejercicio solos, como salir a correr, que lo hagan.
“Hacer ejercicio es muy importante para no descuidar otras áreas de la propia salud, pero por favor no se toquen la cara mientras no se las hayan lavado (las manos)”, recordó.
También aclaró que está permitida la venta de bebidas alcohólicas en licoreras y otros comercios y que la prohibición para la distribución de estas bebidas se limita a bares, casinos y discotecas, que permanecen cerrados.
Contrario al inicio de la semana pasada, Salas se mostró más satisfecho con la respuesta de la población a la emergencia, sin dejar de insistir en que todavía seguirán las muertes y contagios.
“Debemos unirnos todos como comunidad, pero sin aglomeraciones. Este es un trago amargo que tenemos que pasar como país, pero recuerden que llegará un momento cuando esto va a pasar y diremos: lo logramos”, concluyó el jerarca.
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