‘no tengo explicación clara de mi salida’
José Giacone, exentrenador de Herediano, está tranquilo. ‘Quiero seguir dirigiendo, pero sé que esta profesión es inestable’
“Uno viendo la gestión pensó que podía acabar el contrato pero bueno...’
José Giacone está tranquilo. El entrenador del Herediano en su último título y el torneo que todavía se disputa habló con La Nación sobre su salida del cuadro rojiamarillo, después de la eliminación con Alajuelense.
––Usted consigue un campeonato y una clasificación en segundo lugar. ¿Cuál es su concepto de su gestión en Herediano?
—Efectivamente pienso que es una gestión buena que logró un título en un torneo y medio, luego un segundo puesto en una fase regular. Estábamos en un club en el que había una ilusión muy grande por el bicampeonato, además de que tiene sus particularidades, por lo cual llegamos a un acuerdo de no continuidad.
––¿Dónde encuentra la explicación a su salida?
—La explicación la tienen los directivos del Herediano, yo asumo que son situaciones del fútbol y particularidades de cada club. No tengo mucha explicación, porque si uno se pone a analizar la gestión fue más que buena, se logró un campeonato en condiciones que nadie creía, ganando dos finales, agarrando un equipo en sétimo lugar y clasificando y luego logrando el cetro. —Luego se hizo un torneo más que correcto en una situación atípica del fútbol como la pandemia en el medio. Tal vez se dieron reclamos por algunos futbolistas que no tuvieron la participación que se podía esperar por algunas partes, pero son situaciones que a nivel de director técnico se toman decisión en una planilla muy rica y con jugadores de mucha experiencia.
—Yo realmente no tengo una explicación clara de mi salida, lo tomo como una situación que se da en el fútbol, donde hay una idea resultadista y una urgencia que empieza más por el exitismo que por una valoración deportiva.
––¿Qué le dejó Herediano a su carrera como entrenador?
—Me voy agradecido con la gente de Herediano por confiar en nuestro trabajo, yo pude conocer una institución importante, la más ganadora en la última época, el poder haber sido parte de su historia consiguiendo un título junto al cuerpo técnico y los futbolistas. Logré conocer un gran grupo de jugadores con el que tuve muy buena relación. También tuve aprendizaje en cuanto a saber cómo es esta profesión, porque sin una clara explicación pero con la conciencia tranquila de haber hecho un buen trabajo no se logró la continuidad, porque uno viendo la gestión pensó que podía acabar el contrato, pero bueno... Los objetivos de la institución son otros y se prescinde de nuestros servicios.
––A mí me queda claro que usted no se quería ir.
—Sí, lo que pasa es que cuando a uno le dicen que los objetivos son otros, se queda un poco sin argumentos, porque a nosotros nos dijeron que pusiéramos jóvenes, listo perfecto. Si uno analiza la planilla del Herediano, vamos: Orlando Galo, 19 años, jugadores sub23 como Bryan Rojas y Gerson Torres. Además recuperamos a jugadores que venían sin participación y destacaron en nuestra gestión como Berny Burke, Rándall Azofeifa y Esteban Granados, también Ariel Soto. Creo que nosotros recuperamos muchos jugadores que no estaban teniendo buen momento previo a nuestra llegada.
—En el tema grupal e individual se hizo un trabajo correcto, pero en el fútbol los procesos de la parte deportiva se ven afectados por exitismo, el resultadismo y por las expectativas que se generan. Una gestión donde se es campeón de forma histórica y que será recordada en toda la afición por la forma por cómo se dio todo y después hacer un buen torneo en circunstancias atípicas, el hecho de ser cesado es algo extraño.
––Durante el torneo se dijo que había diferencias entre usted y Jafet Soto por la no alineación de algunos nombres como Fabrizio Ramírez. ¿Compaginaba usted con Jafet Soto?
—Yo puedo decir que mi relación con Jafet Soto fue muy buena, sí hubo conversaciones con la junta directiva y reclamos de ese tipo, pero no de parte de Jafet Soto.
––¿Pesó en su contra la falta de minutos de algunos jugadores que la directiva quería ver en el campo?
—Sí, puede ser.
––Usted ya dirigió dos equipos grandes: Alajuelense y Herediano; además triunfó con Pérez. ¿Qué sigue en su carrera?
—Quiero analizar posibilidades, proyectos que estén bien sustentados y seguir para adelante. Yo llevo 14 torneos en los cuales he clasificado seis veces a semifinales y hemos logrado dos campeonatos, hemos tenido siete años de gestión ininterrumpida. Conseguimos clasificar equipos poco comunes como Belén, UCR, La U viniendo de un ascenso, también fui campeón con Saprissa en 2010; entonces en mi hoja de vida hay una trayectoria de números que no son debatibles. Quiero seguir dirigiendo. Sé que esta profesión es inestable, esta situación que pasó me lo demostró.
––¿Más allá del título, recuperar a talentos como Gerson Torres o Bryan Rojas lo deja tranquilo?
—Uno puede hablar mínimo de siete futbolistas que se recuperaron como Esteban Alvarado, Galo, Gerson, Burke, Bryan Rojas, Rándall Azofeifa, Esteban Granados, Yendrick Ruiz, y bueno la consolidación de Aarón Salazar... Pienso que se ha estabilizado un equipo que venía trastabillando antes de nuestra llegada y se logró una estabilidad pese a no llegar a la final.
––¿Pudo pesar la crítica que se le hace en algunas ocasiones a su forma de jugar?
—Eso pienso que es más una etiqueta que tengo yo de defensivo que otra cosa. En este torneo fuimos segundos en goles anotados, hicimos 40 goles, y nosotros fuimos los segundos porque aunque Saprissa tiene 41, ellos recibieron tres goles de un juego ante Grecia que ganaron en el escritorio; además tuvimos el marco menos vencido con 21 goles... Entonces si un entrenador defensivo tiene el mejor gol diferencia del campeonato, ganó partidos por goleada y dio espectáculo como contra San Carlos y Cartaginés, después de la reanudación por la pandemia, esto lo que demuestra es que hay una etiqueta que compra el aficionado, y que cuando no se logra el resultado esperado sale a relucir. Es la misma situación de cuando se gana que se considera al entrenador un gran estratega...
—Cuando es al revés pues se es defensivo. Hay etiquetas montadas y que el aficionado compra de acuerdo a los resultados.