Mitad de hospitalizados por covid-19 ocupa camas en cuidados intensivos
Atención diaria de cada uno cuesta ¢900.000, más medicamentos y salarios de especialistas
Las autoridades de salud lo han advertido una y otra vez: el país debe evitar a toda costa llegar al extremo de tener que decidir a quién dar una cama de cuidado intensivo y un respirador.
Hace dos meses esa posibilidad todavía se veía lejana, pero ya no. Para este viernes, el 45% de las personas hospitalizadas por covid-19 estaba en una unidad de cuidado intensivo (UCI).
Así lo confirman las cifras dadas a conocer por el viceministro de Salud, Pedro González, según el cual, de 469 enfermos en centros médicos, 212 estaban en UCI. Se trata de pacientes con edades entre 24 y 91 años.
La cifra de casos críticos aumentó en 51 en solo 24 horas, pues al jueves anterior había 161 en tal condición.
Ese salto lo ratificó el gerente médico de la Caja Costarricense de Seguro Social, Mario Ruiz Cubillo, quien dijo que la existencia de más pacientes graves va en relación directa con el incremento de hospitalizados.
El aumento en la “complejidad de los pacientes” detectado desde hace semanas también llevó a la Caja a tomar la decisión de transformar el Centro Especializado de Atención de Pacientes con Covid-19 (Ceaco) de hospital para enfermos moderados a hospital para casos graves.
Por eso, Ruiz anunció la “buena noticia” de que se tuvo la capacidad de convertir 72 de las 88 camas del Ceaco en espacios UCI, cada uno de los cuales implica personal y equipo especializado.
Cada cama para un paciente en estado crítico significa para la CCSS una erogación de ¢900.000 diarios, sin incluir los salarios del personal requerido para la atención del paciente ni los medicamentos, algunos de los cuales cuestan hasta $1.000, según el gerente.
A pesar de esto, dijo Ruiz, se logró la transformación, con el trabajo de emergenciólogos, intensivistas y personal de Enfermería, así como equipamiento y capacitación.
“Ha sido un trabajo arduo, institucional, se ha podido equipar el Ceaco y capacitar al personal. El personal de Enfermería ha colaborado montones en ese proceso y, gracias a eso, vamos a poder aumentar la complejidad de los pacientes que tenemos en Ceaco a más pacientes de cuidado intensivo, llegando a tener inclusive 72 pacientes en cuidado intensivo”, informó.
Este centro se abrió en abril en las instalaciones del Centro Nacional de Rehabilitación (Cenare), en la Uruca, inicialmente para pacientes moderados, pero con la idea de transformarlo cuando la realidad de la pandemia lo exigiera.
El gerente médico también indicó que se tomó en cuenta que ese centro opera en conjunto con el Hospital del Trauma, del Instituto Nacional de Seguros (INS). Así, entre los dos tienen 136 camas, de las cuales ahora habrá 72 de UCI y 64 en salón.
Para este viernes, de esas 72 camas, estaban ocupadas 64 con pacientes críticos. Además, estaban llenas las 16 camas de salón en el Ceaco y otras 15 en el Hospital del
Trauma.
Los 148 pacientes críticos restantes se distribuían en las UCI de otros hospitales. De esos, el de mayor capacidad es el Calderón Guardia; sin embargo, ya se han habilitado espacios incluso en hospitales regionales.
Este viernes, por ejemplo, Ruiz se encontraba en Liberia para revisar las acciones dirigidas a habilitar 12 camas UCI y 24 para casos moderados.
Esto ocurrió ayer, día en que se reportó un nuevo récord de contagios diarios: 1.222 (224 por nexo y 998 por prueba de laboratorio).
En las últimas 24 horas se produjeron, además, nueve decesos asociados a la covid-19.
Una enfermera por paciente.
Los pacientes de covid-19 se clasifican en leves (cuando no requieren hospitalización), moderados (cuando tienen problemas de falta de aire, por ejemplo. Están en salón pero no requieren soporte) y críticos (necesitan soporte o tubo para respirar, así como medicamentos vasopresores o soporte renal).
Para estos últimos, se requieren camas especiales y monitores, que pueden ser invasivos o no, además de máquinas de ventilación, dispositivos para oxigenación; y en algunos casos, soporte renal, si el enfermo lo requiere.
En su atención participan, entre otros profesionales, intensivistas y anestesiólogos y, muy importante, enfermeras especializadas. Idealmente, se necesita una profesional por paciente en cada turno, es decir, tres por día.
“Sin tratamiento, solo la cama con la persona cuesta ¢900.000 (diarios). Hay que sumarle a eso tratamientos, los especialistas, una enfermera por turno y medicamentos que pdorían valer hasta $1.000 por día, así como soporte renal, manejo ventilatorio”, detalló el gerente.
Para este viernes, la CCSS tenía habilitadas 359 camas UCI para pacientes covid, de las cuales estaban ocupadas un 59% (212). Hace dos meses, había 24 camas y solo tres ocupadas.
Este es el panorama a cinco días de la fase de reapertura controlada bajo el nuevo modelo de “Costa Rica trabaja y se cuida”. Este permitirá mayor movilización de personas y actividad económica, pero también exigirá una gran responsabilidad y discplina en el cumplimiento de uso de mascarilla, higiene y distanciamiento.