‘Hay algo en mi corazón que me dice que ella no está ahí’
››búsqueda en botadero se detiene este domingo para replantear el caso
“Hay algo en mi corazón que me dice que mi hija no está ahí (en el botadero clandestino de San Jerónimo de Cachí). Siento que es mentira y hasta que no tenga pruebas, hasta que no me digan que había algo de Allison (Bonilla) ahí, no voy a dejar de perder la fe.
”Pienso que él (el sospechoso de violarla y matarla) está mintiendo y, sinceramente, me puse a pensar que él no actuó solo. Cómo un mes después va a aparecer la cédula.
”Creo que hay muchos cabos que atar porque una persona sola no va a hacer lo que él dijo que le hizo a Allison, jamás. No voy a descansar, así como no he descansado en estos seis meses, esperando esta respuesta, no voy a descansar, porque si hay más culpables tienen que estar igual que él (en prisión preventiva)”.
Las palabras anteriores, dichas este sábado por Yendry Vásquez Cordero, madre de Allison Pamela Bonilla Vásquez, reflejan incredulidad, fe y deseos de que se haga justicia.
Un día después de que trascendiera que un hombre de apellidos Sánchez Ureña confesó haber asesinado a Bonilla, su mamá sigue creyendo que podría estar con vida y por eso es que insiste en que hasta que las autoridades encuentren algo de la muchacha en el lugar va a pensar distinto.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) suspendió las labores de búsqueda del cuerpo para este domingo, con el fin de replantear la ruta del caso.
Captura. Allison Bonilla desapareció el 4 de marzo anterior cuando regresaba a su casa en la urbanización Florencio del Castillo, en Ujarrás de Paraíso, Cartago.
De acuerdo con la investigación, el sospechoso, al parecer, fue el último en tener contacto con Bonilla antes de que se perdiera el rastro de su paradero.
Precisamente, fue por eso que se hicieron diversas diligencias, entre ellas un allanamiento el 25 de marzo pasado en la casa de Sánchez, también en Ujarrás, donde le decomisaron su carro.
Luego de los análisis científicos, se determinó que un rastro de sangre encontrado dentro de la cajuela del vehículo coincidía con el ADN de la joven, por lo que se señaló al sujeto, de 28 años, como sospechoso de la desaparición y se le siguió la pista por semanas.
Casi seis meses después de la desaparición, el 2 de setiembre anterior, se procedió a detener a Sánchez.
Tras la captura, fue pasado a manos de la Fiscalía para la indagación correspondiente y, al parecer, fue cuando el hombre rompió el silencio y confesó haber violado y asesinado a la joven de 18 años.
Pese a todos esos indicios, Yendry Vásquez tiene la corazonada de que hay inexactitudes en la historia, ya que argumenta que poco después de perder contacto con su hija, ella y su familia rastrearon los alrededores de la zona, incluida la finca donde el sujeto la habría matado de un golpe en la cabeza.
“Nosotros estuvimos ahí”, insistió.
Replanteamiento del caso.
Este sábado, Yendry Vásquez y su familia estuvieron por más de seis horas a un lado del punto donde agentes judiciales, rescatistas de la Cruz Roja, oficiales de la Fuerza Pública y miembros de la empresa privada Equipo de Rescate Urbano trabajan desde el jueves buscando algún indicio de Allison.
Ahí, Vásquez conversó con una psicóloga de la Cruz Roja, quien apoya a sus compañeros en las labores y está disponible para dar soporte a la familia.
Para este domingo, las labores de búsqueda estarán suspendidas, confirmaron las autoridades.
Luego de tres días con jornadas de hasta 12 horas, marcadas por un clima “muy pesado, con mucha humedad e incluso con casos de deshidratación del personal, tanto los que están arriba como los que descienden” se concluyó que es oportuno hacer una pausa.
A estas labores se han sumado decenas de personas y es por ello que el OIJ comunicó que este domingo realizarán una pausa para replantear la ruta del caso.
Confirmaron que de momento no se ha ubicado ningún indicio del cuerpo de la joven. “Se tomarán un respiro luego de tres días y realizarán un replanteamiento de la labor de búsqueda y qué va a continuar con respecto a este caso”, informó la Policía Judicial por medio de su oficina de prensa.
Mauricio Mendoza, coordinador de Operaciones de la Cruz Roja de Cartago, dijo que el apoyo de ellos para con el personal judicial se ha extendido por seis meses, pues han participado en buceos y otras labores con equipo vertical.
Aseguró que el trabajo en la zona es “complicado”, por los factores climáticos y propios del terreno. Detalló que el precipicio es de 300 metros y que como la gente bota basura, hay que tener cuidado. De ancho, la extensión del perímetro donde se busca es de entre 10 y 15 metros.
En tanto, Héctor Blanco, de Rescate Urbano, contó que en la zona ya se ha abarcado cerca del 50% y que son necesarias técnicas especializadas para la seguridad de todos.▪