Elian Villegas muestra apertura para ajustar la propuesta al FMI
››‘no está escrita en piedra, tampoco en hielo’, dijo el jerarca este sábado
Elian Villegas, ministro de Hacienda, evitó reconocer abiertamente si el plan inicial de ajuste económico que el Gobierno le propondrá al Fondo Monetario Internacional (FMI) carece de viabilidad política, pese al rechazo de las fracciones de oposición de la Asamblea Legislativa.
El jerarca sí admitió la posibilidad de que la iniciativa sufra ajustes antes o durante el proceso de negociación con los diputados, que se iniciaría la próxima semana.
No obstante, aclaró que cualquier cambio se hará dentro del plan estratégico del Gobierno.
Este se basa, según dijo, en la necesidad de estabilizar las finanzas públicas y reactivar la economía, y en la idea de generar “ciertos recursos” a través de ingresos y recorte de gastos.
Agregó que se debe tomar en cuenta lo dicho por el presidente de la República, Carlos Alvarado, de no incrementar el impuesto del valor agregado (IVA), no gravar salarios inferiores a los ¢800.000, no hacer despidos masivos, no vender activos estratégicos del Estado y tampoco tocar a las zonas francas.
Así lo dijo Villegas este sábado al ser consultado por el plan que se negociará con el FMI en octubre, el cual se acentúa sobre más impuestos y deja en segundo plano el recorte al gasto público.
“Siempre tuvimos claro que esa propuesta es inicial. Como lo he dicho repetidamente, no está escrita en piedra, tampoco está escrita en hielo. No estamos cerrados, estamos abiertos a conversar y poder llevar adelante cualquier cambio que sea necesario siempre que esté inserto en el esquema planteado por el Gobierno”, dijo el ministro.
El Poder Ejecutivo acude al FMI para obtener un financiamiento de $2.250 millones en un plazo de tres años, ante los efectos de la pandemia que dejarían una caída del 5% del producto interno bruto en 2020 (PIB) y una baja de ¢1,2 billones en ingresos corrientes.
A cambio, Zapote se comprometería a implementar un plan de ajuste económico que ayude a disminuir el déficit fiscal, previsto para este año en 9,3% del PIB, y variar la trayectoria ascendente de la deuda pública que al 2021 alcanzaría, sin ninguna medida, el 80,5% de la producción.
El paquete, comunicado al país el jueves, propone por cada ¢3 adicionales que se pretende recaudar en nuevos tributos, solo ¢1 de ahorro por parte del Gobierno.
Entre el 2021 y el 2024 el paquete generaría ingresos de un 17,5% del PIB y ahorros por un 6,4% de la producción.
Así, el Gobierno les pediría a los contribuyentes ¢6,4 billones en tributos y ahorraría ¢2,3 billones en gastos.
Críticas. Ese desequilibrio generó el rechazo de las fracciones de oposición de la Asamblea Legislativa.
Las cámaras empresariales también hicieron señalamientos y las críticas se extendieron a las redes sociales.
Pese a los cuestionamientos, Villegas evitó referirse a la viabilidad de la iniciativa. “No puedo decir si es inviable o no políticamente. Falta escuchar más voces, la propuesta se está conociendo, dejemos que camine un poco más”.
La noche de este viernes, en un comunicado de prensa, la fracción del Partido Liberación Nacional (PLN) mantuvo invariable su posición sobre la necesidad de negociar un acuerdo de ajuste económico con el FMI que ayude a estabilizar las finanzas públicas.
El PLN calificó de “inaceptable” el plan inicial del Ejecutivo, al señalar como evidente el desbalance.
Por su parte, la bancada del Partido Restauración Nacional (PRN), manifestó su rechazo a establecer nuevos impuestos. El partido propone generar un mayor recorte del gasto público, “una lucha real” contra la evasión y elusión fiscal y la eliminación de exenciones fiscales.
Horas antes, el presidente del Congreso, Eduardo Cruickshank, afirmó que no veía ambiente entre los diputados para aprobar más impuestos.
La fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) y el bloque Nueva República, también adversaron el plan.
“Vamos a escuchar al Gobierno, pero no vamos a aprobarle las iniciativas de impuestos”, dijo Rodolfo Peña, vocero del PUSC.