Sonidos de mono araña permitirán determinar su condición y hábitat
La inglesa Jenna Lawson estudió y se especializó en biología de la conservación por un motivo: quería contribuir a la preservación de los ecosistemas.
El mono araña (Ateles geoffroyi paniscus) es una criatura clave para los estudios de biodiversidad.
“Esta es una de las especies más importantes en los bosques. En particular, es muy sensible a lo que suceda en su entorno. Por ejemplo, sería la primera criatura en desaparecer cuando el bosque se degrade por alguna razón, pero luego de todos los esfuerzos de rescatar el lugar, cuando ya se restituya el bosque, esta sería la última criatura en aparecer”, explicó Lawson.
Por eso, ella escogió el análisis de esta especie para su trabajo de tesis para obtener un doctorado en la universidad Imperial College, de Londres.
Con este fin vino a Costa Rica y se internó en la península de Osa durante tres años para “ponerle un micrófono” al mono araña y escuchar lo que tenía que decir.
“A través de sus sonidos, de sus llamados, podemos saber dónde está, cuántos hay, dónde la actividad humana ha tenido mayor impacto, y que por esa razón ya no se le ve. Todo eso es clave en el estudio”, destacó la investigadora.
Hoy, los resultados aún no son definitivos, pero sí le permiten decir algo: por lo que ha escuchado hasta el momento, el “hogar favorito” de ese mono es el Parque Nacional Corcovado, pero no tanto otros lugares de la zona, como el Parque Nacional Piedras Blancas.
Las razones de esa predilección son parte de lo que aún está en proceso de averiguarse.
Comportamiento según zonas. Lawson y su equipo movilizaron sus grabadoras por distintas regiones de la península de Osa: los parques nacionales Corcovado y Piedras Blancas, el humedal Térraba Sierpe, las reservas biológicas y, por otro lado, lo escuchado en plantaciones de palma y teca.
Funcionarios del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) y de la Universidad de Costa Rica (UCR) les ayudaron en sus labores para determinar cuáles eran las mejores áreas para colocar estas cámaras.
“La inteligencia artificial me dice dónde está el mono. Aún está en análisis, pero, por lo visto hasta hoy, no está en plantaciones de teca o palma, tampoco cerca de caminos donde pasan las personas. Corcovado es su lugar favorito. Conforme nos alejemos de Corcovado, los sonidos se hacen cada vez menores y más débiles”, aseguró la científica.
“Lo curioso es que no se ve tanto en el parque Piedras Blancas, que se supone que es parte de su hábitat, ¿qué estará ocurriendo ahí? ¿Por qué no está? Es parte de lo que debemos trabajar”, agregó.
Reunir sonidos en video. Con todos los sonidos que se han grabado, Lawson planea hacer un video interactivo en el que la gente pueda escuchar los sonidos del mono, ver en un mapa dónde se ubican y observar los cambios de la actividad de este primate según el tipo de región y su uso de suelo.
Ese video está en proceso, pero ya tiene uno con los sonidos de la península, en el que se escuchan las diferentes especies de la zona y sus interacciones. Allí se oye la diferencia entre las dinámicas en parques nacionales, humedales, plantaciones y centros de población.
El material que Lawson tiene grabado le da para analizar cómo están las poblaciones de otras especies, como el mono aullador o el mono ardilla.
“Con esto ya tengo una base de datos de sonidos que pueden utilizarse para análisis posteriores. Hay mucho que puede salir acerca de cómo se encuentra la biodiversidad de la zona”, puntualizó.
Para ella, la razón por la cual estudió biología de la conservación fue para ayudar a los ecosistemas y a las personas, y el saber de la salud de las especies del ecosistema en Osa ayudará a luchar contra el peligro de extinción.
SU ENTORNO
“LA inteligencia Artificial me Dice DÓNDE ESTÁ EL mono. AÚN ESTÁ En ANÁLISIS, Pero, Por Lo Visto HASTA HOY, no ESTÁ En Plantaciones DE teca o PALMA, tampoco cerca DE caminos DONDE PASAN LAS PERSONAS. corcovado ES Su Lugar Favorito”. Jenna Lawson científica