Exjerarca de Uccaep recrimina la firma inconsulta de Jenkins
Álvaro Sáenz Saborío, expresidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep), reprochó al jerarca actual, Jose Álvaro Jenkins Rodríguez, firmar un acuerdo no consultado, con el grupo responsable de actos de violencia denunciados penalmente, que dejaron pérdidas millonarias y más de 100 heridos.
Sáenz, quien presidió Uccaep por un año, hasta setiembre pasado, atribuyó a Jenkins defraudar el diálogo multisectorial por presuntos cálculos en torno al tamaño de la delegación de la Unión frente a otras representaciones, en esa conversación prevista para empezar ayer sábado y ahora cancelada.
La negativa de la Uccaep, junto con otros ocho sectores, impidió conformar la mesa de diálogo coordinada por el Programa Estado de la Nación, tendiente a buscar opciones para reformular una propuesta de reformas internas para equilibrar las finanzas estatales y pedir un crédito al Fondo Monetario Internacional (FMI).
“A mí lo que me extrañó es que el mismo día que se le dice al presidente Carlos Alvarado y al presidente de la Asamblea Legislativa que no iría al diálogo, van y se reúnen con esas personas. Eso no está mal, pero el jueves se firma un acuerdo en nombre del empresariado, que no se acordó en el Consejo Directivo de Uccaep. El jueves hubo reunión del Consejo y no se habló de eso”, aseguró Sáenz, integrante aún de ese órgano.
Para Sáenz, la firma del acuerdo reviste mayor gravedad porque supone una aprobación del empresariado de “pseudorrepresentantes sociales que la misma Uccaep, apenas días antes, calificó de terroristas”. “Me parece sumamente desafortunado, por lo tanto”, aseveró.
Este sábado, Uccaep divulgó un video de Jenkins donde este admitió que la reunión con “Rescate Nacional” nunca fue una representación formal de la Unión, sino una cita para oír posiciones de los líderes de ese grupo y transmitirles sus inquietudes por las pérdidas causadas por los bloqueos.
En su mensaje de este fin de semana, sin embargo, Jenkins no mencionó la firma del acuerdo con ese grupo, la noche del jueves.
Como en el Titanic. Sáenz insistió en que Uccaep ya dispone de una agenda clara construida durante su recién concluida presidencia, centrada en la reactivación económica y la generación de empleo. Para él, en el jerarca de Uccaep subyace otro afán que se aparta de ese derrotero.
“En esas mesas de diálogo quieren estar todos, pero nadie entiende para qué. Bueno, pues para que les toque el menor costo posible de la grave y pesada medicina por imponer desde el exterior para prestarnos plata. Eso es. Que no digan que es para otra cosa, es para eso”, concluyó.
“Estos pleitos ahorita se centran más en quién representa a quién y cuántos asientos tengo y cuántos tiene la otra representación. De eso se trata esto.
”Es como pelear asientos en el bote salvavidas del Titanic mientras este se hunde”, recalcó.
Siguiendo con la metáfora, Sáenz insistió en que el Titanic hoy lo representa el flujo fiscal de caja del Gobierno que, según prevé, va a colapsar en los primeros meses del 2021 a menos que las autoridades tengan acceso a préstamos del FMI, el que, recordó, de todos modos impondría condiciones para otorgar los fondos.