Municipio de San José transforma ‘parque de los indigentes’ en un jardín
Daba miedo, y mucho, pasar por el parque ubicado frente al Ministerio de Salud, en San José. Pero tal parece que transitar por ese sitio, en el día o en la noche, ya no causará tanto temor.
Lo que hasta hace pocos meses era dormitorio, baño, vestidor y servicio sanitario de decenas de habitantes de la calle, se transformó en un jardín que pocos reconocerían como el otrora llamado “parque de los indigentes”.
Su nombre oficial es parque Solón Núñez Frutos (18811975), en honor a uno de los médicos más destacados en la historia de Costa Rica, a quien se le atribuye la creación de la Subsecretaría de Higiene y Salud Pública, en 1922, que luego se tranformaría en el actual Ministerio de Salud.
El jefe de parques de la Municipalidad de San José, Hernán Sancho, confirmó que el Ayuntamiento invirtió en esta transformación poco más de ¢100 millones, entre árboles, jardinería, diseño, iluminación y otras obras de “cirugía plástica” .
Sancho informó de que el terreno pertenecía, originalmente, a la Junta de Protección Social de San José (JPS).
“La Junta le cedió un área de parqueo al Ministerio de Salud e hizo una transferencia del resto del terreno a la Municipalidad de San José.
”La Alcaldía de San José, que tiene proyectos de recuperación de áreas para el disfrute de la ciudadanía, decidió intervenir el parque Solón Núñez”, explicó Sancho.
Las inundaciones que hace dos o tres años atrás afectaban gran parte del paseo Colón, incluyendo estructuras como la del Hospital Nacional de Niños, obligaron a hacer trabajos de excavación justo en ese parque, porque ahí pasa, por debajo, la quebrada Lantisco.
Las obras para corregir ese alcantarillado, que dejaron abiertos numerosos fosos en esa propiedad, fueron aprovechadas para intervenir de una vez este sitio.
De acuerdo con Sancho, solo en aceras nuevas se invirtieron ¢15 millones.
A esa cantidad hay que sumar ¢76 millones para la recuperación del área verde, ¢12 millones en materiales, ¢51 millones en mano de obra y ¢12,3 millones en maquinaria y combustible, por citar algunos costos.
Cinco meses. Los trabajos de intervención se iniciaron en mayo y terminaron el pasado 31 de octubre. Se está a la espera de la inauguración y apertura oficial.
Las mejoras incluyen asientos dobles, en forma de U, sin respaldar, muy alejados de las tradicionales bancas que se pueden convertir en imán y en “cama” para los habitantes de la calle.
Además, se levantaron luminarias para mantener el sitio con suficiente claridad durante la noche, y el diseño se realizó con aceras diagonales pensando en que el ser humano siempre tiende a cortar distancias, precisó Sancho.
Hay 75 árboles diferentes: desde roble sabana hasta corteza amarilla. En los alrededores se sembraron jacarandas y llamas del bosque. También se metió zacate dulce y arreglos florales.
Junto a la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL), se trabajó en todo el cableado subterráneo para evitar el robo de esos insumos, y se colocará diariamente a dos funcionarios para su mantenimiento. El cuido mensual de ese parque costará, solo en el pago de salarios, alrededor de ¢1,4 millones, confirmó Sancho. Con el resto de trabajos, la inversión mensual total ascenderá a ¢2,2 millones.
La seguridad estará dada por los sistemas de vigilancia electrónica y recorridos periódicos de la Policía Municipal.
Áreas verdes. Entre parques y áreas verdes, el cantón central de San José tiene 571 espacios. Los distritos que más parques tienen, en metros cuadrados, son Pavas y Hatillo.
En el casco histórico sobresalen el Braulio Carrillo (frente a la iglesia La Merced), el Central, la plaza de la Democracia, el Morazán, el España y el José María Cañas, por nombrar solo algunos.
La Municipalidad destina un presupuesto ordinario anual de ¢3.300 millones, de los cuales ¢300 millones son para la parte operativa de mantenimiento y el resto para el pago de planillas.
Andrés Fernández, arquitecto y cronista de la ciudad de San José, en su relato sobre el Solón Núñez, afirma que siempre fue un parque “que nunca lo hicieron”.
“Fue previsto desde el año 1940, pero nunca lo hicieron en el sentido estricto. Estaba contemplado como una plaza que tributara al edificio de Salud. De hecho, es uno de los pocos espacios públicos que se hicieron en esos años.
”En 1905 se hizo la plaza Mora Fernández, frente al Teatro Nacional, y la plaza Mora Carrillo, frente a la iglesia La Merced. Este espacio vino a enriquecer esa zona, pero con una característica que podríamos llamar desgraciada: nunca se hizo parque. Se le hizo la acera, pero nunca se diseñó como tal”, recuerda Andrés Fernández.