Perros aceleran las búsquedas
Tres perros adiestrados para búsquedas en montañas, de las razas pastor belga malinois y pastor alemán, permiten acelerar las labores cuando no se tiene un área específica.
Alvin Villalá Rodríguez, coordinador del Grupo Técnico Especializado K-SAR (por sus siglas en inglés K- Search And Rescue), dijo que se aprovechan las capacidades olfativas del can para rastrear grandes áreas.
“Todo perro tiene millones de células olfativas para procesar muchas partículas al mismo tiempo y más rápido que el ser humano. Por eso, se le entrena para búsquedas focalizadas, en este caso de personas vivas”, dijo Villalta.
Los canes entran rápidamente por terrenos de interés, a veces escabrosos, en los que se mueven con más facilidad que los rescatistas y permiten ganar tiempo.
Recordó que hace como tres años, en Tabarcia de Mora, dos perros descartaron en cuatro horas la búsqueda de un adulto mayor en siete hectáreas de Hacienda El Rodeo.
Los familiares decían que se había extraviado en una zona específica, pero como los perros lo descartaron, los rescatistas replantearon el sitio de búsqueda y el hombre fue hallado en un lugar agreste, diferente del punto originalmente planteado.
“Estaba a punto de caer la noche y, gracias a que se redujo el campo de acción, los compañeros lo encontraron. De lo contrario, le habría tocado pasar una difícil noche a la intemperie que, en caso de adultos mayores, puede llevar a hipotermia”.
Esta unidad de la Cruz Roja fue fundada después del terremoto de Limón, en 1991. Tres años después, lograron los primeros resultados en búsqueda y rescate con perros.
El adiestramiento se enfocó primero en búsqueda de personas en estructuras colapsadas. Luego se entrenó a varios perros para entrar a la montaña, lo cual siempre se hace en coordinación con la Unidad de Búsqueda Terrestre.
La certificación del perro dura dos años, en los que realiza un trabajo diario de ejercicio, caminatas y obediencia.