Visita de tío le dio valor a menor para acusar a padrastro por violación
› Responsable de la agresión sexual fue sentenciado a 36 años de prisión
Redactor y corresponsal de GN Una inusual pero oportuna visita de un tío le ayudó a una menor, vecina del centro de Limón, a tomar valor y contarle a su familiar que el padrastro la violaba.
Ese relato ocurrió el 20 de abril del 2020, apenas dos días después de que el tío llegó de visita, cuando se sintió en confianza para decirle lo que estaba pasando con ella.
Ella no había hablado con anterioridad pues el imputado la tenía amenazada de que si le decía algo a la madre, él tomaría venganza.
Todos estos pormenores trascendieron ayer miércoles al concluir un debate en el cual el Tribunal de Juicio de Limón condenó a un guarda de seguridad identificado como Roberto Pascual Urbina Baldelomar, a descontar 36 años de prisión por cuatro delitos de violación agravado y un abuso sexual.
Prisión preventiva. Los jueces prorrogaron por seis meses la prisión preventiva del imputado, que tiene 45 años, mientras el fallo adquiere firmeza.
El abogado Juan José Picado, defensor de Urbina, dijo que esperará a conocer la sentencia integral para determinar si impugna el fallo.
“Tenemos que esperar a la entrega de la sentencia para analizarla y determinar si se encuentra o no ajustada a derecho para poder recurrir. Desde el punto de vista legal, se debe analizar si existe una debida fundamentación de parte del tribunal”, añadió.
Picado agregó que su representado siempre alegó durante el contradictorio ser inocente de los hechos que le atribuyeron.
“Él declaró en juicio y juró por Dios que todo eso que le están atribuyendo es un falso, que él nunca en la vida le ha faltado al respeto a su hijastra y menos a otras niñas que también lo están acusando. Él lo que está indicando es que es un asunto familiar, porque la niña no se llevaba bien con él”, agregó el abogado.
Recuento. Según la acusación que presentó la Fiscalía Adjunta de Limón, los hechos que se juzgaron se dieron, primeramente, entre enero del 2013 y el 31 de julio de ese mismo año. Luego hubo otros hechos delictivos ocurridos el 5 de febrero del 2019 y el 16 de abril del 2020.
La primera violación ocurrió cuando la niña tenía siete años. En esa ocasión, Urbina se aprovechó de que ambos estaban solos en una casa en barrio Quinto de Limón para amenazar a la víctima con un cuchillo y violarla.
La segunda fue una noche en que el sujeto aprovechó que dormía con la menor para agredirla sexualmente.
La tercera violación sucedió la noche en que murió la abuela materna de la niña y ambos quedaron solos en una casa en barrio Los Cocos de Limón.
El último ultraje se dio en abril del 2020, cuando la víctima fue sorprendida por el sujeto mientras ella dormía en su cuarto, en la casa en barrio Los Cocos. En ese momento, ella ya tenía 14 años.
Durante el debate sobre este caso, también se le atribuyó a Urbina Baldelomar un abuso sexual en perjuicio de otra niña, que era vecina de Los Cocos.