Matra convenció a 15 empleados temerosos por información falsa
Los mensajes antivacunas, las advertencias de un pastor o la desinformación de redes sociales, no les ganaron a las explicaciones de los médicos que contrató la empresa costarricense Matra para convencer a sus trabajadores que no querían recibir las dosis contra la covid-19.
Se trata de 15 funcionarios que, por motivos religiosos o noticias falsas, temían aplicarse el fármaco, pues creían que, al recibirlo, iban a ser espiados por el Gobierno, castigados por Dios o enfermarían gravemente, pero nada de eso sucedió.
Así lo relató a La Nación el encargado de Salud Ocupacional de Matra, Diego Chaverri, quien celebró que, gracias al acompañamiento y asesoría de profesionales médicos, lograron explicarles a sus 400 trabajadores los grandes beneficios del medicamento y ahora celebran que el 100% de su planilla tenga al menos la primera dosis.
Por el momento, solo un 65% cuenta con el esquema completo, pero la compañía ya se puso manos a la obra para coordinar con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) la posibilidad de inocular al resto de trabajadores lo más pronto posible, con una campaña extraordinaria en sus instalaciones.
Chaverri contó que al inicio realizaron un sondeo para verificar cuántos empleados se habían vacunado y conocer las razones de los que aún no lo habían hecho. A estos últimos se les consultó cuáles eran sus inquietudes y con base en sus manifestaciones prepararon materiales y reuniones en tiempo laboral para abordar cada caso.
“Uno decía que por ahí salió un video en Estados Unidos que decía que el virus fue creado por humanos y que la vacuna lo que pretendía era controlar ciertas cosas. Otro trabajador decía que era por un tema religioso, de que el virus lo había mandado el Señor y que era para todo el mundo, entonces que la vacuna no lo iba a librar de nada. Los demás era más que todo por desinformación sobre los supuestos efectos de la vacuna.
“Primero, hicimos una sesión virtual con el doctor Isaac Grajales, del área covid-19 del Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia. Estuvimos como una hora y media atendiendo dudas, uno a uno, siempre con datos de respaldo para aclarar todo con un enfoque científico. Luego solo quedaron cinco trabajadores con duda e hicimos otra sesión con el médico intensivista Miguel Srur, que logró convencerlos”, detalló.
Desde que comenzó el año, la empresa brindó un día libre con pago para que los trabajadores se fueran a vacunar y permitió que los que tuvieran algún efecto secundario tomaran los días que fueran necesarios (con goce de salario) hasta que se sintieran mejor. Incluso, puso carros de la compañía a disposición para llevar a los vacunatorios a los empleados que lo requirieran, sin importar la zona del país en la que estaban.
Con las personas que se oponían a las dosis, tardaron hasta dos meses en convencerlas, pero nunca se rindieron. Chaverri se unió al médico de la empresa para informar a los indecisos, pero cuando vieron que necesitaban refuerzos, trajeron a Grajales y Srur para que relataran las difíciles experiencias que habían vivido con pacientes de covid-19 que no se vacunaron y la importancia de la inoculación. La estrategia fue un éxito.
Esta firma tiene sus oficinas en Coyol de Alajuela y 15 sucursales. Tiene más de 60 años de comercializar equipos para construcción, agricultura, transporte de mercancías.