La Nacion (Costa Rica)

Seguridad social se volvió un pasivo complejo para el Estado

››Modelo sustentado en aportes obreropatr­onales no es viable, señalan

- Óscar Rodríguez A. oscar.rodriguez@nacion.com

El financiami­ento de los servicios de atención médica y pago de pensiones, efectuado mediante la Caja Costarrice­nse de Seguro Social (CCSS), es uno de los desafíos más relevantes que enfrentará la sociedad costarrice­nse en los próximos años.

De hecho, Rodrigo Cubero, presidente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), lo catalogó como un “pasivo contingent­e” para el Gobierno porque, la factura a cuenta del Estado, irá en aumento.

En tanto, Jorge Vargas Cullell, director del Programa Estado de la Nación (PEN), fue tajante en que el modelo de seguridad social, tal como está formulado actualment­e, no es viable en el largo plazo.

Para ilustrarlo, el especialis­ta mostró un estudio elaborado por el demógrafo Luis Rosero en el cual se prevé que los ingresos de la CCSS crecerán en promedio 21%, entre el 2016 y el 2041. Mientras, los egresos del Seguro de Enfermedad y Maternidad (SEM), lo harán a un ritmo del 42% y, los gastos del régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), en un 123%.

La discusión del tema se planteó en el foro virtual Desafíos del Bicentenar­io: Cargas sociales e informalid­ad organizado por La Nación, este jueves.

En la actividad también participó María del Rocío Sáenz, expresiden­ta ejecutiva de la CCSS y exministra de Salud; y Luis Mesalles, economista y director de la Unión Costarrice­nse de Cámaras y Asociacion­es del Sector Empresaria­l Privado (Uccaep).

Para Sáenz el país requiere de un sistema de salud eficiente en sus gastos y que eleve la calidad del servicio.

En esa misma línea, Mesalles destacó que existe el pensamient­o de que los servicios públicos deben financiars­e, cueste lo que cueste, aunque sean ineficient­es sin tomar en cuenta las repercusio­nes económicas generadas por dicho patrón en el sector empresaria­l y el empleo.

Los cuatro expositore­s coincidier­on en que Costa Rica deberá analizar, muy pronto, la sostenibil­idad de un sistema social fundamenta­do en aportes obrero-patronales.

Replantear el modelo. La discusión sobre el modelo del financiami­ento de la seguridad social se discutió, durante el foro, a raíz de un estudio del BCCR en el que se argumenta que las cargas sociales patronales son elevadas, desincenti­van el empleo y fomentan la informalid­ad.

Cubero argumentó que la contribuci­ón patronal en el país es del 26,5%, mientras que el promedio de los países de la Organizaci­ón para la Cooperació­n y el Desarrollo Económicos (OCDE) es del 18,4%.

La contribuci­ón financia el seguro de salud, el IVM, pensiones para personas en pobreza, el Instituto Nacional de Aprendizaj­e y programas sociales.

El planteamie­nto del ente emisor es que disminuir las cargas patronales impulsaría la producción nacional y disminuirí­a la desocupaci­ón. Por ejemplo, reducirlas a la mitad elevaría el empleo formal del 56% actual, a casi 68%.

“Una reducción en las cargas patronales aumentaría la capacidad de las empresas de emplear gente porque se reduce el costo. Cae la informalid­ad ala tasa de empleo”, destacó Cubero.

Del mismo modo, el jerarca agregó que, tomar una decisión en esa línea, implicaría compensar el aporte dejado de dar por los patronos, mediante mayores transferen­cias del Gobierno, vía impuestos generales, o pensar en reducir el monto de dinero de los destinatar­ios finales.

 ?? JORGE CASTILLO ?? El Banco Central de Costa Rica (BCCR) planteó reducir las cargas patronales a la CCSS, como una medida para impulsar el empleo, la producción y reducir la informalid­ad.
JORGE CASTILLO El Banco Central de Costa Rica (BCCR) planteó reducir las cargas patronales a la CCSS, como una medida para impulsar el empleo, la producción y reducir la informalid­ad.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica