Policía recupera 45 reses robadas en la frontera norte con valor de ¢14 millones
La policía recuperó 45 reses, valoradas en unos ¢14 millones, las cuales habían sido robadas en los sectores de La Cruz de Guanacaste y en el distrito de Pocosol, en San Carlos de Alajuela.
Sobre el particular, Juan Carlos Arias, director regional de la Fuerza Pública en la frontera norte, argumentó que este viernes en la subasta ganadera de Upala fueron localizados 23 de los bovinos que habían sido transportados en dos camiones.
Por orden de la Fiscalía de Upala, los animales fueron decomisados y posteriormente devueltos a sus propietarios.
Mientras tanto, los choferes de los dos camiones, de apellidos Chaves y Rojas, acabaron detenidos, al igual que otro sujeto que los acompañaba y cuya identidad, de momento, no trascendió.
De acuerdo con las versiones preliminares del caso, uno de los conductores es reincidente, pues fue interceptado la semana pasada en Pocosol, cuando llevaba, en el mismo camión, 20 caballos contrabandeados desde Nicaragua, informó el Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
De acuerdo con la denuncia formulada por los propietarios, los animales que iban a ser puestos a la venta en la subasta de Upala fueron sustraídos de una finca ubicada en El Concho, distrito de Pocosol, cantón ubicado en territorio sancarleño.
Robos millonarios. Asimismo, los otros 22 animales fueron recuperados luego de que se recibió una alerta de un finquero de la comunidad de Los Andes, distrito de La Garita, La Cruz, quien denunció que le habían sustraído los bovinos, cada uno valorado en al menos ¢312.500.
Gracias a un control de carreteras que desarrollaba la Fuerza Pública en el distrito de Santa Cecilia, también en La Cruz, los vacunos fueron hallados a bordo de un automotor ganadero conducido por un sujeto de apellido Muñoz, quien posee antecedentes por robo agravado.
Quienes transportaban las reses, presentaba varias inconsistencias, en especial en lo referido a las guías y los fierros de los vacunos.
Desde hace años los robos de ganado, principalmente en horas de la madrugada, constituyen uno de los problemas más graves que afrontan los finqueros de la zona norte, ya que se estima que las pérdidas anuales rondan los ¢3.600 millones, pues en promedio se roban o destazan nueve animales al día.