Buena memoria y gran curiosidad identifican a niños con alto potencial
Los niños o jóvenes con alto potencial presentan una inteligencia general superior a la media y, aunque pertenecen a un grupo muy heterogéneo, algunos tienen características que los padres pueden ver desde que son muy pequeños.
Identificar esos rasgos es una gran herramienta para la familia a la hora de que el menor empiece su vida en el sistema educativo, pues así los encargados podrán comprender muchas de las actitudes y comportamientos de estos niños.
Azucena López, psicóloga y coordinadora de proyectos de Edunámica, explicó que entre las principales características que presentan estos menores es que son autodidactas y tienen un amplio abanico de intereses (como la historia, la astronomía, la matemática, la química, el arte) o, por el contrario, solo se interesan en un área.
“Tienen una memoria extensa y detallada, particularmente en sus áreas de interés; se enfocan y son buenos específicamente en sus áreas de interés”, explicó López.
Otras de las cualidades que menciona la experta es que cuentan con una capacidad excepcional para razonar y aprender, en comparación con niños de su misma edad. También son capaces de demostrar un alto grado de curiosidad, plantean preguntas constantes, muestran un nivel elevado de desarrollo del lenguaje y alta comprensión verbal, presentan un vocabulario amplio y son lectores precoces.
“Son niños que tienen una gran preocupación por temas sociales, ambientales y políticos, así como por las injusticias, por lo que se verán siempre involucrados en actividades que les permitan contribuir a nivel social o a ser parte de una organización de ayuda en un área en particular”, dijo López.
Por otro lado, también tienen comportamientos impacientes con ellos mismos y con las torpezas o lentitud de las demás personas.
Apoyo constante. Una vez que los padres identifican el alto potencial en sus hijos, se inicia una etapa trascendental en la defensa educativa.
Una de las maneras de apoyarlos es buscar cómo incentivar su aprendizaje exponiéndolos a experiencias en el teatro, museos y eventos que sean de su interés.
Según López, un aspecto muy importante a trabajar en estos niños es su parte psicológica.
“Atendí a un niño de siete años en mi consulta y trabajamos para que entendiera y reconociera su fortaleza en el aprender y comprender, reconocerse como un niño de alto potencial. Este niño decía que sentía que a los demás compañeros les molestaba que él fuera inteligente, ya que cuando recibía sus exámenes y eran de 100, o lo felicitaban por sus trabajos, le hacían malas caras y se molestaban con él”, contó la psicóloga.
Ante este tipo de situaciones, la experta recordó que en el país se cuenta con la Ley para la Promoción de la Alta Dotación, que ampara a estos niños y permite solicitarle al centro educativo una evaluación para recibir la atención de parte de la institución y del Ministerio de Educación Pública (MEP).