Fuente contaminada suministra 50% del agua de la planta de Guadalupe
La fuente de agua contaminada con el hidrocarburo xileno es la que provee el 50% del líquido que se potabiliza en la planta de Guadalupe, la cual atiende a 107.000 habitantes de los cantones de Moravia, Goicoechea y Tibás.
De acuerdo con el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), esta es una de las razones por las que dos semanas después de que se inició la emergencia, el suministro no ha podido normalizarse.
Alejandro Calderón, subgerente de sistemas del AyA para la Gran Área Metropolitana (GAM), explicó que la fuente identificada como Quebrada Honda 2 aún no puede utilizarse, por directriz del Ministerio de Salud, pues continúan realizándose muestreos.
Según detalló, cuando se confirmó la contaminación fue necesario sacar de operación por completo la planta de Guadalupe y drenar los tanques. Esta labor implicó que más de 250 kilómetros de tuberías quedaran completamente secas.
Una vez identificado el sitio donde se produjo la contaminación, el caudal que suministraban las otras dos fuentes no era suficiente para volver a llenar el entramado de tuberías y el sistema completo. Por esta razón, justificó el AyA, fue necesario extender el periodo de racionamientos controlados que se dieron tras la interconexión de otros tres sistemas que darían soporte al de Guadalupe.
“Como nos falta el 50% del agua que entra a Guadalupe, la única forma de acelerar la recuperación es poniendo otros sistemas; estos son los de Tres Ríos, que es agua que proviene de Orosi; Los Sitios, que proviene del norte de Moravia, y el sistema de la Valencia, que proviene de Heredia”, detalló.
La medida de “apoyar” con otros sistemas afectó a más de 200.000 personas de
La Unión, Coronado, Montes de Oca, Curridabat y San José, donde también se aplican “racionamientos controlados” desde el 29 de enero, pues fue necesario disminuir el caudal de esos tres sistemas para redirigirlo a los usuarios de las zonas con afectación.
De esta forma, la crisis del agua no solo perjudicó a residentes de Tibás, Moravia y Goicoechea, sino a pobladores de otros cinco cantones. En total, fueron poco más de 300.000 personas.
De acuerdo con el subgerente, se espera que durante esta semana se recupere el caudal que requiere la planta de Guadalupe, para normalizar el suministro.
En un comunicado enviado el domingo, la entidad indicó que los racionamientos se mantendrían hasta el 11 de febrero.
Enojo. Mientras eso ocurre, la principal molestia de cientos de usuarios que a diario abarrotan con sus comentarios las redes sociales del AyA es, además del faltante de líquido, el incumplimiento de los horarios que se anuncian para los llamados “racionamientos controlados”.
Por ejemplo, en los comunicados de Acueductos se indica que en Tibás la suspensión se realizaría de 2 p. m. a 10 p. m.; sin embargo, los residentes reportan que desde tempranas horas de la mañana ya no hay líquido y el servicio se restablece hasta la madrugada.
En Goicoechea, se apuntó que para esta semana los cortes serían de 6 p. m. a 5 a. m., pero muchos pobladores afirman no tener agua desde horas de la mañana.
El funcionario señaló que los racionamientos y horarios dependen no solo del líquido que se inyecte, sino del consumo. El problema, dijo, es que en este momento se está dando de manera acelerada, debido al mismo temor de la población de quedarse sin agua, lo cual provoca que los tanques se vacíen con mayor rapidez de la estimada y tarden más en recuperarse.