Sarapiquí lucha por su vida y necesita la ayuda de todos
› Este sábado habrá una cuadrangular con exjugadores de Primera División, en Santa Bárbara
El exfutbolista Edwin Sarapiquí Salazar necesita ayuda, que le tiendan una mano para enfrentar las molestias, dolores y dificultades que enfrenta día tras día.
María del Carmen Quesada Rojas, esposa del exseleccionado nacional que disputó dos eliminatorias mundialistas, una Copa de Oro y ganó la Copa Uncaf en 1991, realiza una serie de actividades para recaudar fondos y así poder hacerles frente a las necesidades que en este momento tiene su cónyuge, quien padece de cáncer y tiene un tumor en el cerebro.
“Necesitamos tenerle un enfermero porque le han dado convulsiones muy fuertes y hay que ponerle una serie de inyecciones. No es cualquier persona que lo puede atender en el momento en que está en la convulsión; tiene que ser un profesional porque el cuerpo se pone rígido y hay que hacer mucha fuerza”, explicó Quesada.
La esposa de Sarapiquí añadió que no saben cuándo lo afectarán las convulsiones. Si ocurren durante el día, acuden a una doctora que tiene su consultorio cerca de la casa del exjugador, pero necesitan a un enfermero que lo atienda, especialmente durante las noches.
Quesada comentó que, en el 2020, a Salazar le empezó el cáncer en las glándulas salivales; un año después lo tuvo en un pulmón, y ahora tiene un tumor en el cerebro. Añadió que no es operable, recibió quimioterapia en pastillas y también radioterapia, pero en el hospital les dijeron que ya no pueden hacerle nada más.
“A él le dio la primera convulsión la semana pasada y empezó a deteriorarse más. Le cuesta caminar, los piecitos no se le sostienen. Cuando se le habla, hay que hacerlo despacio, porque termina muy agotado al esforzarse al tratar de recordar y le da dolor de cabeza. Edwin no conversa con uno, solo puede hablar lo necesario”, detalló.
María del Carmen y su familia harán un bingo para recaudar fondos. Además, este sábado 17 de febrero se efectuará una cuadrangular entre la Selección Máster de Costa Rica y los equipos máster de Saprissa, Alajuelense, Cartaginés y Bremen.
Los partidos se disputarán en la cancha de Santo Domingo de El Roble, en Santa Bárbara de Heredia.
La esposa de Salazar destacó que el sábado van a tener ventas de comidas y empezarán con la preventa de cartones para el bingo, que están por definir si se hace a finales de este mes o a principios de marzo, en el salón comunal de San Bosco de Santa Bárbara.
Las personas interesadas en colaborar para la atención médica de Sarapiquí también pueden hacer una contribución por Sinpe Móvil al 60494954, a nombre de María del Carmen Quesada Rojas.
“Ando buscando y recogiendo premios con gente y amigos que nos han hecho donaciones para poder realizar muy pronto el bingo, pero nos hacen falta para poder promocionar bien la actividad”, indicó María del Carmen.
Gran defensa. Edwin Salazar tiene 61 años y, como jugador, es recordado por su paso en el Deportivo Saprissa.
Oriundo de Río Frío de Las Horquetas, en Sarapiquí, vino a terminar su bachillerato en Heredia. Ahí fue visto e invitado a jugar con las promesas del Club Sport Herediano. Estuvo en las ligas menores del Team, Alajuelense, Cartaginés y Santos de Guápiles, hasta que en 1983 ascendió con los brumosos a la máxima categoría.
Jugó con los blanquiazules varias temporadas y, en 1988, pasó al Saprissa. Entre 1991 y 1993 militó con el Uruguay de Coronado, el Alianza de El Salvador y el Vida de Honduras, antes de regresar al equipo morado. Se retiró en 1997.
Como defensor morado, jugó 144 partidos en Primera División, marcó dos goles y ganó cuatro títulos nacionales. Integró la Selección Nacional desde 1986, y con la Tricolor disputó dos eliminatorias mundialistas, una Copa Oro y la Copa Uncaf de 1991. Es padre de tres hijos y dirigió varias escuelas de fútbol. *