MEP y Seguridad buscan cómo reforzar los centros educativos
› Policía se incautó de arma de fuego y otra ‘menos letal’ en lo que va de curso
La ola de violencia desafía no solo a las autoridades policiales, sino también a las educativas, pues a pocas semanas del inicio del curso lectivo se han enfrentado a hechos antes inimaginables.
El 19 de febrero, niños, trabajadores y padres de la Escuela Silvestre Grant, en El Cairo de Siquirres, en Limón, fueron testigos y hasta víctimas de una balacera justo a la hora de la salida de clases. Frente al lugar, el padrastro de una alumna quedó sin vida, mientras que las madres de dos estudiantes y tres menores resultaron heridos.
El ataque, aunque no estaba dirigido contra la escuela, afectó profundamente a la comunidad educativa. Hubo suspensión de clases y padres que comenzaron a dudar si volver a enviar a sus hijos a esa institución.
Dos días después de ese tiroteo, un estudiante del Colegio de Rincón Grande de Pavas, San José, acabó herido de bala; al parecer, un proyectil le rozó la cara.
Según las autoridades, el hecho ocurrió porque un alumno llevó al centro educativo un arma y, por una mala manipulación, la accionó de forma accidental dentro de uno de los baños.
El Ministerio de Educación Pública (MEP) y el de Seguridad trabajan para reforzar el papel de los recintos como espacios seguros.
Con ese fin, la ministra Anna Katharina Müller se reunió anteayer con el viceministro de Seguridad, Erick Lacayo, y personal técnico.
Las citas continuarán en las próximas semanas hasta tener una estrategia definida. Para Müller, solo con un trabajo conjunto se pueden generar líneas de acción para enfrentar futuros incidentes.
Según datos brindados a La Nación por el Ministerio de Seguridad Pública (MSP), en las primeras dos semanas del curso lectivo se decomisaron al menos dos armas dentro de lugares de estudio; una de fuego en Pavas y otra “menos letal” en Desamparados.
Esta última funciona con aire comprimido, como balines. Aunque no pueden causar lesiones tan graves como las armas de fuego, dependiendo de la distancia, pueden tener un impacto significativo en la persona afectada.
Enid Castro, jefa de la Contraloría de Derechos Estudiantiles, aseguró que el MEP cuenta con protocolos para atender situaciones de violencia, los cuales fijan pautas para abordar situaciones que afecten a la población estudiantil.
El Colegio de Profesionales en Orientación insistió en la necesidad de hablar con claridad a los menores de edad, pues en muchas ocasiones los padres ocultan información a sus hijos con la intención de protegerlos, pero esto puede exponerlos aún más, al no enseñarles cómo reaccionar ante un hecho de violencia.