La Nacion (Costa Rica)

‘Sele’ luchó con todo ante Canadá

› Costa Rica queda fuera en tiempos extra por la mínima, en un gran partido

- Fanny Tayver Marín fanny.tayver@nacion.com

En la Selección Femenina de Costa Rica lo prometiero­n, lo intentaron, cumplieron y no defraudaro­n en el propósito de no solo participar, sino competir y mostrar una versión aguerrida contra Canadá, en los cuartos de final de la Copa Oro.

No era pecar de ilusas, sino entrar en razón y percatarse de que no había motivo válido para darse por menos contra unas rivales poderosas y arrollador­as.

Así se dio en un partido que ameritó incluso los tiempos extra. Si bien es cierto, Canadá se dejó el triunfo en el alargue, la Tricolor también la tuvo para hacer historia contra las campeonas olímpicas.

La portera nacional Daniela Solera tuvo intervenci­ones certeras y en más de una ocasión se jugó el físico sin importarle nada. Fue la misma garra con la que Valeria del Campo, Fabiola Villalobos, Gabriela Guillén y Emile Valenciano defendiero­n lo mejor que podían.

Raquel Rodríguez siempre con nota alta, Gloriana Villalobos extenuada, al igual que las laboriosas y veloces Priscila Chinchilla y María Paulas Salas.

Ellas, por citar algunas, pero es que en realidad todas fueron puro corazón y entrega en la cancha contra las canadiense­s.

Salas tuvo que ser atendida porque un golpe en la boca la hizo emanar sangre, pero continuó.

No pasó así luego del infortunio de la recién ingresada Mariela Campos, quien pronto se marchó lesionada y entre lágrimas. La toma televisiva de ese instante donde se torció el tobillo proyectó una imagen horrible.

Canadá tenía lo suyo, como siempre, intentándo­lo una y otra vez, pero el equipo estaba incómodo, ante un conjunto patrio bien plantado que llevó a las norteameri­canas a la desesperac­ión.

No hay nada de malo en decirlo: Costa Rica también contó con suerte en algunas acciones, pero generó opciones claras que por desdicha no se concretaro­n.

Alexa Herrera recibió un pase de Gabriela Guillén y tuvo en sus botines una oportunida­d para lograr algo histórico. No lo hizo por una tapada escandalos­a de la guardameta Kailen Sheridan.

En los tiempos extra podía pasar lo que fuera y un cabezazo de Evelyne Viens en el minuto 103 dictó la sentencia, pero Costa Rica lo intentó hasta el final, como en ese remate de Valeria del Campo; con Daniela Solera subiendo al ataque, o un remate de media distancia de María Paula Elizondo.

Las integrante­s de la Sele Femenina regresan de la Copa Oro muy distintas, con más confianza y a sabiendas de que son capaces de hacer un partidazo, como contra Canadá.

Ilusión. La delantera Raquel Rodríguez asegura que la Selección Nacional recuperó los bríos y deseos de sobresalir.

“Estos partidos se ganan o se pierden en jugadas de balón parado. Eso fue lo que aprendimos del partido pasado, no nos alcanzó, nos salvamos de muchos otros goles, pero creo que hubo mucho avance”, afirmó Rodríguez en declaracio­nes en vivo a ESPN, una vez finalizado el juego.

Añadió que las jugadoras volvieron a sacar ese corazón, esa pasión por la camiseta y está segura de que eso las sacó adelante y las hizo llegar hasta tiempos extra.

“Siempre uno como competidor no se va a gusto con la pérdida, sobre todo estando el partido tan cerrado, pero me voy como con una luz que antes, hace mucho, no se encendía en nosotras”, resaltó la capitana de la Selección Femenina de Costa Rica.

Lo que más la llena es que le dieron un espectácul­o a la gente, a la vez que aseguró sentirse muy orgullosa de lo que el grupo logró hacer durante una Copa Oro que le sirvió a las jugadoras y a la misma afición para volver a creer.

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ROnalD maRTinEz Raquel Rodríguez disputa el balón con Ashley Lawrence en el partido entre Canadá y la Selección Femenina de Costa Rica, en los cuartos de final de la Copa Oro.

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