Cifra de viviendas residenciales empezadas en 2023 cayó 2,3%
› BCCr publicó nuevo indicador para evaluar oferta y entender demanda
El número de viviendas residenciales comenzadas en el 2023 experimentó una reducción del 2,3% en comparación con el año anterior, según el Índice Mensual de Inicio de Unidades Residenciales (Imiur), publicado por primera vez por el Banco Central de Costa Rica (BCCR).
Este nuevo indicador, presentado ayer, ofrece datos más precisos sobre la actividad de construcción de viviendas, incluyendo oferta y demanda, según el Banco Central.
Los resultados interanuales muestran que la cantidad de casas residenciales, que comenzaron su proceso constructivo, disminuyó 10,2% durante el primer semestre del 2023 y aumentó 6,3% en el segundo semestre, resultando en una caída anual del 2,3% respecto al 2022.
Sin embargo, para enero de este año, se observó un aumento interanual del 52,6% en el indicador, debido al inicio de proyectos de interés social y edificios de apartamentos, apuntó el BCCR.
Marcial Rivera, jefe de Gestión de Procesos del Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos (CFIA), dijo que al ser un indicador mensual, un proyecto en particular puede generar un valor muy alto en un mes, pero un mismo periodo sin proyectos grandes puede hacer que se presenten valores negativos.
Rivera agregó que un efecto muy evidente que incentiva los valores reducidos son los meses que tienen semanas de vacaciones, como Semana Santa o fin de año (diciembre), en los que se presenta un menor inicio de construcción de viviendas.
El índice abarca el periodo desde julio del 2020 hasta enero del 2024. El Central detalló que el Imiur proporciona cobertura nacional y se publicará regularmente durante la tercera semana de cada mes.
La información básica para elaborarlo consiste en contar mensualmente la cantidad de nuevas unidades residenciales en construcción en el país, utilizando los registros de vivienda con los que cuenta el CFIA.
En este caso en particular, Rivera manifestó que utilizaron la herramienta de Bitácora Digital, en la cual los profesionales de la ingeniería y arquitectura realizan anotaciones cuando dirigen una construcción.
Con base en esa interacción digital, el Colegio puede informarle al Banco Central el momento en que inicia una construcción.
Según el vocero, el índice refleja de manera muy exacta cuántas unidades habitacionales están empezando a construirse en el país.
Con esos datos, el BCCR calcula el indicador utilizando julio de 2020 como referencia, con un valor inicial de 100. Se destaca que el dato ofrece una visión actualizada y completa de la actividad de construcción de viviendas.
Entre los posibles usos, se destaca la evaluación de la oferta, la identificación de escasez o excedente de soluciones habitacionales y la comprensión de los cambios en la demanda. También sirve como insumo para prever la demanda futura de residencias.
En cuanto a la planificación urbana, el Central argumentó que el indicador brinda datos para anticipar las necesidades de infraestructura, planificar sistemas de transporte, gestionar el crecimiento urbano de manera sostenible y evaluar oportunidades de inversión.
Henry Vargas, director de la División de Gestión de Información del BCCR, apuntó que el índice es útil para los procesos de planificación urbana debido a que el aumento en la construcción de viviendas está relacionado con una mayor demanda de infraestructura y servicios públicos.
Otra función determinante de la herramienta es servir como indicador de la potencial demanda de empleo en la industria de la construcción y otras actividades relacionadas, ya que ofrece información complementaria para entender el ciclo económico.■