ADG también hace gran fiesta con Alajuelense
› Presión sube al máximo entre los manudos debido a una nueva derrota
Guanacasteca se encargó de hacer pasar un nuevo mal rato y con goleada incluida a Liga Deportiva Alajuelense bajo el calor de Nicoya. Se sabía que iba a ser un partido caliente en todo sentido y el pronóstico no falló. La Liga salió hirviendo de ahí, con una derrota más.
“Ole, ole, ole, ole...”. Ese cántico salía desde las gradas donde estaban los aficionados guanacastecos, mientras que la molestia del liguismo no cesa, no da tregua y sigue la tensión.
No era algo difícil de adivinar, porque tampoco es nada nuevo que el equipo de Horacio Esquivel sea un dolor de cabeza para la Liga. Esa tendencia se repitió en el Estadio Chorotega, donde la ADG se dejó el triunfo (3-0), con buenas anotaciones de Greivin Méndez, Ryan Cane y Steven Williams.
Más sufrimiento. Fue la continuación de la pesadilla rojinegra, un resultado que le mete presión a la misma dirigencia, porque la solución no estaba nada más en el despido de Andrés Carevic.
Alajuelense necesita definir qué hará, porque la urgencia ahora es evitar a toda costa que el equipo siga caído, tendido en la lona después del nocaut recibido en Estados Unidos.
También es cierto que los rojinegros lo intentaron en Guanacaste. La Liga proponía y se veía con una actitud más agresiva que en sus últimas presentaciones, con algunas llegadas de Diego Campos y Jonathan Moya.
El partido era atractivo y pese al calor, se veía intensidad por parte de los dos equipos, pero las cosas empezaron a complicarse para los manudos a partir del minuto 14, cuando el árbitro central Adrián Chinchilla ignoró una falta sobre Diego Campos.
Seguidamente, Yael López cometió una entrada fuerte sobre Greivin Méndez y le mostraron la tarjeta roja directa.
Alajuelense protestó en pleno, no por esa roja como tal, sino porque si el silbatero hubiese pitado la falta anterior, eso no habría ocurrido.
La Liga sentía que el arbitraje incidía en el juego. Las molestias se incrementaron cuando Adrián Chinchilla, muy cerca de la acción, no pitó como penal una falta en el área de Yeison Molina contra Johan Venegas.
Alajuelense estaba de malas por la manera en la que se presentaba el juego. Aparte de la roja, había otro problema. Michael Barrantes se resintió en una acción fuerte donde él mismo cometió una falta y aunque continuó en el juego, llegó el momento en el que no pudo más.
Se veía muy adolorido en el tobillo. Salió con hielo y caminaba apoyado en sus compañeros. Sin necesidad de un parte médico, esa imagen suya da para pensar que será baja para el juego del jueves contra New England Revolution en el Morera Soto.
Objetivo. Guanacasteca se centraba en lo suyo, que era hacer un buen partido y ganar. La ADG supo sacar provecho de esa expulsión en la Liga y llegaron sus goles, muy buenos por cierto.
El primero fue en el minuto 31, en una jugada individual de Greivin Méndez que le ganó el pulso a Guillermo Villalobos, entró al área y dejó sin reacción a Edward Cedeño. Después de eso, sacó el remate y venció a Leonel Moreira. Fue una muy buena maniobra del futbolista de Guanacasteca. Para decirlo simple: ¡Golazo!
De inmediato, Martín Arriola se sentó en el banquillo, contrariado al ver a la Liga con el marcador en contra, después del esfuerzo que hacían los rojinegros, con un hombre menos, por la expulsión de Yael López.
La segunda anotación de la ADG fue en el inicio del complemento, con la autoría de Ryan Cane, quien simplemente tocó el balón, pero toda la jugada fue de Marvin Esquivel. Él se quitó todas las marcas que quiso, y dejó ver muy vulnerable la zona baja de Alajuelense.
El tercer gol fue en el cierre del partido, con un centro de Joseph Bolaños y Steven Williams se encargó de ponerle el tinte de goleada al encuentro.
A la Liga no le salió nada, ni siquiera ese remate de Carlos Mora que pegó en el palo, o un tiro libre de Aarón Suárez que desvió el portero Antonny Monreal.
Guanacasteca montó una verdadera fiesta en las gradas, porque este resultado ayuda en su anhelo de clasificar a semifinales y de ganarse un cupo para jugar a nivel internacional en la Copa Centroamericana de Concacaf.
Mientras que, con respecto a la Liga, su afición presente en el estadio se puso a cantar algo así: “El que no quiera jugar, el que no quiera jugar, quítese la camiseta”... Y unas cuantas cosas más que usted podrá imaginar.