Arias exploró en reunión el posible apoyo de Chaves
Rodrigo Arias, presidente legislativo, se reunió con el presidente Rodrigo Chaves en un restaurante de San José, a fin de explorar un posible respaldo a su candidatura para presidir la Asamblea Legislativa por un tercer año consecutivo. La cita fue el martes 5 de marzo.
La confirmación de la cita provino primero de Pilar Cisneros, jefa de la bancada de gobierno, y luego fue corroborada por Arias, quien dijo que él gestionó la cita.
“Tengo el interés de seguir presionando la agenda de seguridad; es vital para el país. También me interesa trabajar mucho en el tema social, con una posible pensión básica universal para tantos costarricenses que, ya en su vejez, no tienen ningún ingreso. Esa es la razón por la cual quisiera quedarme un año más”, expuso Arias, quien busca apoyo para su reelección después de que la bancada del Partido Liberación Nacional (PLN) se decantó por su candidatura en lugar de la del diputado Gilberth Jiménez.
Cisneros dijo que Chaves no comprometió ningún voto de su fracción para el candidato verdiblanco. “No tomaremos ninguna decisión hasta después de Semana Santa”, afirmó.
Freddy Morera Blanco, ministro a. i. de la Presidencia, descartó la participación de la ministra del ramo, Natalia Díaz, en la conversación entre Arias y Chaves.
Arias detalló que la reunión fue respetuosa. “No tuve ninguna reacción negativa, para ponerlo así. Tampoco me dijo que sí me iba a apoyar, pero quedamos en que el tema lo ampliaremos”, añadió.
El Frente Amplio anunció este lunes que dará sus seis votos para respaldar un directorio de oposición, siempre que Arias no sea el candidato, según el subjefe de bancada, Antonio Ortega. Ese partido le achaca al actual líder legislativo no representar adecuadamente las posturas de la oposición frente a lo que consideran un gobierno autoritario.
Ortega le reprocha a Arias haber respaldado el proyecto de jornadas 4-3 impulsado por el gobierno, permitir demoras en la discusión y votación de planes ligados con los derechos humanos, restar importancia al control político y no mostrar proactividad en la defensa de la inversión social.