Bob Marley casi convierte en canción un poema tico
Al cantante jamaiquino le fascinó la pieza literaria ‘Intangible Love’, de la escritora eulalia Bernard, pero un singular detalle truncó la idea de hacer una versión musical
Junto a clásicos de la música como Three Little Birds o Is This Love, del amplio y trascendental repertorio de Bob Marley, podría haber figurado el poema Intangible Love, de la escritora y educadora costarricense Eulalia Bernard.
Así lo revela el libro Las malcriadas: historias de mujeres que se salieron del canasto, del autor Alfredo González, en el capítulo dedicado a la histórica mujer nacida en Limón.
En 1977, debido a su participación como delegada de la Organización de Estados Americanos en el Primer Congreso de la Cultura Negra de las Américas, en Colombia, Bernard había establecido buenos contactos que la llevaron a emprender una misión por los países angloparlantes del Caribe. Un año después, cuando el gobierno de Rodrigo Carazo la nombró agregada cultural en la representación diplomática en Jamaica, fue que pudo conocer a Marley.
Marley habría quedado fascinado con el poema de la costarricense, incluido en el disco Negritud: Poesía negra costarricense, publicado en 1976 con la disquera INDICA. El intérprete de Buffalo Soldier incluso le mostró interés en convertir los versos de la limonense en una canción.
“Es lógico suponer que se haya llevado varias copias del disco con ella, para hacer promoción cultural de un país multiétnico y pluricultural. Eulalia siempre tenía eso en mente; mucho más que el autobombo, de hecho”, explicó González.
Intangible Love utiliza expresiones en inglés propias del contexto del Caribe. Los versos se desarrollan como una conversación entre una madre y su hijo, quien le cuestiona a su progenitora el amor que le manifiesta. Para el chico, el cariño que se tienen es una farsa.
Durante el poema se reflexiona sobre un amor más allá de lo material, que se encuentra profundamente arraigado en lo cotidiano y se manifiesta en los cuidados y las acciones desinteresadas. Esto se refleja perfectamente en su conclusión: “Bueno, hijo, me alegro de que descubras que el amor de una madre negra es intangible”.
No obstante, la posibilidad de escuchar en la voz de Marley esta obra, perteneciente a la primera mujer afrodescendiente en publicar literatura en Costa Rica, se vio truncada debido a un malentendido causado por diferencias de carácter cultural.
Según recoge el libro, el artista consultó a Bernard sobre qué sustancias consumía a la hora de escribir, y tras esta responderle que ninguna, perdió el interés. Esto, asegura el texto, debido a que para Marley “el trance era ritual indispensable para componer” y que como practicante del rastafarismo “consideraba al cannabis como algo sagrado”.
es lógico suponer que ella se haya llevado varias copias del disco (Negritud: Poesía negra costarricense, que contenía grabado el poema), para hacer promoción cultural de un país multiétnico y pluricultural. eulalia siempre tenía eso en mente; mucho más que el autobombo, de hecho”.
Alfredo González,
ESCRITOR DEL LIBRO ‘LAS MALCRIADAS: HISTORIAS DE MUJERES QUE SE SALIERON DEL CANASTO’