¿Matrimonio igualitario?, no todavía
Ni líderes políticos, ni público están a favor, según consulta de LA REPÚBLICA
Para los aspirantes a la Presidencia de la República, así como para otras figuras políticas destacadas, la aprobación del matrimonio igualitario que exige la comunidad LGTBI, no es una prioridad.
Antes de garantizar ese derecho, la sociedad costarricense debería validar las uniones civiles de las parejas del mismo sexo y a partir de ahí, promover una mayor apertura para que el matrimonio deje de ser una figura exclusiva de los heterosexuales.
La idea es que a mediano plazo, quizá unos diez o 15 años, se cree la conciencia social y cultural necesaria, para hacer el cambio.
Al tratarse de un tema sensible que incluye creencias religiosas para al menos un 60% de la población actualmente, los aspirantes prefieren no comprometerse con la minoría gay.
Ese es el caso de José María Figueres y Antonio Álvarez, del PLN, así como de Rodolfo Piza y Rafael Ortiz, del PUSC, mientras que Otto Guevara, del Movimiento Libertario, considera que el país tiene temas urgentes que debatir, como el desempleo y la contención del gasto.
La excepción a la negativa serían Epsy Campbell del PAC y Patricia Mora del Frente Amplio, quienes consideran que la orientación sexual no debe ser discriminatoria para ningún derecho.
La posición de Rodolfo Hernández, candidato del Partido Republicano, ya fue publicada en este medio la semana antepasada.
En lo que sí hay un poco más de apertura entre los líderes políticos es en la aprobación de la adopción, ya que esta sería una solución para unos 3 mil niños que se encuentran en los albergues del Pani.
La composición de la familia ha variado considerablemente y no es extraño que un hombre gay, o una pareja diversa críe uno o más niños.
Ese es el caso de “Mairena”, un transgénero que cuidó de un niño desde los tres meses de edad y cuando ya estaba en el kínder, tuvo que enfrentar a la madre biológica que reclamaba al infante; sin embargo, los tribunales, tutelando los derechos del menor no lo separaron de su madre adoptiva.
En este aspecto representantes de todos los partidos están dispuestos a tutelar este derecho, aunque siempre hay excepciones como es el caso de Natalia Díaz del Movimiento Libertario y Ortiz del PUSC.
En cuanto a los lectores de LA REPÚBLICA, la mayoría no acepta la institución del matrimonio para las parejas diversas.
Sin embargo, la diferencia es mínima, ya que los opositores al matrimonio igualitario apenas superan en un 10% a quienes sí lo respaldan, de acuerdo con un sondeo realizado la semana pasada.
Otro aspecto que llama la atención es el hecho de que prácticamente todos los candidatos están a favor de tutelar derechos patrimoniales, como por ejemplo heredar, conseguir préstamos conjuntos y dividir bienes en caso de separación.
Sin embargo, propuestas de este tipo se encuentran estancadas en el Congreso.