Ottón Solís niega show político en investigación del cemento chino
Oposición está segura de obtener pruebas de tráfico de influencias
Aunque muchos de sus compañeros de fracción califican la investigación del cemento chino como un “show político”, una novela o serie de Netflix, Ottón Solís, diputado y fundador del PAC, niega esa aseveración.
Solís asevera que él y todos los integrantes de la comisión investigadora —incluyendo a los diputados de Liberación Nacional— realizan una importante labor de control político, con el objetivo de probar o descartar, un supuesto tráfico de influencias para beneficiar al empresario cementero Juan Carlos Bolaños.
Las críticas sobre los congresistas se intensificaron en el Plenario por parte del oficialismo, algunos analistas políticos y en las redes sociales en los últimos días, después de la comparecencia del mandatario Luis Guillermo Solís.
Esto, porque los diputados no probaron una conexión directa del mandatario con el otorgamiento del crédito a dicho empresario, a pesar de que el Presidente aceptó que Bolaños fue en siete ocasiones a Casa Presidencial y se reunió con altos jerarcas allegados a él como Melvin Jiménez, exministro de la Presidencia; Mariano Figueres, director de la DIS, y Víctor Hugo Morales Zapata, exdiputado del PAC.
“Ha habido un empresario que ha tenido una carpeta roja en varias instituciones del Estado y ha logrado un montón de beneficios. Hay que investigar si hubo algún pago. Yo no estoy montando ningún show político alrededor de este tema y creo que otros diputados tampoco. Pienso que están haciendo un trabajo serio como por ejemplo Ronny Monge, de Liberación Nacional”, aseveró Solís.
En principio, los legisladores que analizan el tema deberían rendir un informe a inicios de octubre, no obstante, debido a que el número de comparecencias aumentaría en los próximos días, Ronny Monge, presidente del foro investigador, pediría una prórroga de 45 días adicionales.
De esta forma, la comisión culminaría su labor a mediados de noviembre, a dos meses y medio de las elecciones.
“No quiero aventurarme a decir que hay un tráfico de influencias aún, pero creo que vamos a conseguir las pruebas en su momento. Acá no hay ningún show político. Habrá gente que quiere decir eso, pero esa gente quiere defender a Carlos Alvarado, candidato del PAC”, agregó Monge.
El escándalo político afectaría no solo la imagen del gobierno, sino también la del PAC, el presidente Luis Guillermo Solís y principalmente la de Alvarado como aspirante presidencial de ese partido, de acuerdo con analistas.
Los diputados investigan las condiciones financieras que rodearon el préstamo de $20 millones que brindó el BCR al empresario Bolaños, además, de la supuesta red gubernamental que le habría ayudado a modificar el reglamento de importación de cemento para así romper el duopolio en el mercado.
Por otra parte, también pretenden conocer las circunstancias que mediaron en un préstamo a Coopelesca para que comprara una planta hidroeléctrica de Holcim.