Arroz nacional será insuficiente por consumo desmedido
Problema se agrava por bajo nivel de producción
Se deberán importar al menos 60 mil toneladas métricas de arroz en junio y julio para poder satisfacer la demanda hasta diciembre. Esto como consecuencia del crecimiento de la demanda ante el temor del Coronavirus al punto de que las ventas aumentaron un 52%, respecto al promedio anual, según la Corporación Arrocera Nacional (Conarroz).
Este pico en la demanda se da precisamente en momentos en que se experimenta un problema de producción, tras la caída de 27 mil hectáreas en la proyección de siembra de este período.
“Estamos realizando gestiones ante el Gobierno para tratar de reactivar el sector mediante la permanencia de los productores actuales y el incremento de 5 mil hectáreas”, comentó Isabel Quirós, directora ejecutiva de Conarroz.
Antes del repunte en ventas, se había previsto que el producto en inventario alcanzaba para los próximos cinco meses.
¿Cómo evitar que otros bienes sufran los mismos efectos?
Aunque representantes de otros sectores de bienes de gran consumo, como el atún o frijoles, garantizan el abastecimiento, los establecimientos han tomado medidas para evitar la escasez.
Por ejemplo, ciertos productos, incluyendo arroz, pueden ser adquiridos en hasta un máximo de seis unidades en Walmart, como manera de garantizar el suministro a todas las familias.
“También los clientes pueden adquirir hasta tres unidades por persona de analgésicos, alcohol, alcohol en gel, toallas desinfectantes, jabones antibacteriales, desinfectantes, detergentes, entre otros”, comunicó Mariela Pacheco, subgerente de Asuntos Corporativos de Walmart.
Se intentó contactar a miembros del Ministerio de Economía (MEIC) y Ministerio de Agricultura de Ganadería para tratar el tema, sin embargo, al cierre de edición aún no se contaba con respuesta.
No obstante, incluso cuando se afirmaba que había abastecimiento suficiente, desde el MEIC se enviaba un mensaje de la necesidad de tener consciencia y comprar meramente lo necesario.
“Queremos hacer un llamado a la calma y al consumo racional. Hemos estado en estrecha comunicación con empresas del sector privado para vigilar que los canales de distribución se refuercen y no existan distorsiones de mercado con sus productos”, mencionó a mediados de marzo Victoria Hernández, ministra de Economía.