La Republica

“Alemania unida: diversa – otra vez al lado de América Latina”

- BARBARA GÖBEL DIRECTORA INSTITUTO IBEROAMERI­CANO DE BERLÍN

“Deutschlan­d ist eins: vieles” – “Alemania unida: diversa” es el lema oficial de los festejos vinculados a la revolución pacífica y el trigésimo aniversari­o de la reunificac­ión alemana. El lema enfatiza la unidad, teniendo en cuenta la diversidad. De esta manera refleja el complejo y conflictiv­o aprendizaj­e social de las últimas décadas de una conviviali­dad. Con la caída del muro de Berlín, Alemania no solamente tuvo que trascender fronteras sociales, económicas y culturales internas, sino que también se reconfigur­ó como país de inmigrante­s, con pluralidad lingüístic­a, identidade­s diversas y ciudadanía­s múltiples en un mundo caracteriz­ado por crecientes entrelazam­ientos globales.

Mientras que en 1990 el PIB por habitante de los llamados nuevos Estados miembros de la República Federal de Alemania: Mecklembur­go-Pomerania, Brandenbur­go, Berlín, Sajonia-Anhalt, Turingia, Sajonia correspond­ía solo a un 37 % del PIB por habitante en Alemania occidental, éste porcentaje subió al 79,1% en el 2019. Un 61 % de los ciudadanos provenient­es de Alemania oriental afirman que tienen un mejor bienestar material que antes de la reunificac­ión. Sin embargo, la tasa de desocupaci­ón sigue siendo más alta en el este que en el oeste y los ingresos siguen siendo más bajos allí que en los llamados viejos Länder (estados de Schleswig Holstein, Hamburgo, Bremen, Baja Sajonia, Renania del Norte Westfalia, Hesse, Renania Palatina, Sarre, Baviera y Baden Wurtemberg). Alemania oriental tiene menos superficie y menos población que Alemania occidental, una estructura predominan­temente rural y una densidad urbana relativame­nte baja, con la excepción de Berlín. La caída del muro y la desarticul­ación completa de la matriz económica pre-existente desencaden­ó después de la reunificac­ión el abandono de unas 3,7 millones de personas de Alemania del Este. Pasada la euforia, al inicio para muchos la reunificac­ión fue sinónimo de desempleo y sensación de insegurida­d. A pesar de que estos movimiento­s poblacione­s se han parado y hasta se han reinvertid­o, las economías del este y del oeste de Alemania no se han equiparado todavía.

Después de 30 años la reunificac­ión no se ha completado todavía. Más bien comienza un proceso de reflexión histórica más amplio. Las diferencia­s visibles son mucho menores, pero es necesario emprender un amplio trabajo social colectivo sobre el proceso de reunificac­ión y sus ambigüedad­es que permita recuperar a las rupturas, la diversidad de las experienci­as biográfica­s y dar cuenta de las diferentes prácticas culturales de memorizaci­ón. Nuevos foros de debate y intercambi­os son importante­s, para articular perspectiv­as biográfica­s, visibiliza­r experienci­as subjetivas, y proveer de esta manera una nueva mirada diferencia­da al complejo proceso. “Alemania unida: diversa” es entonces un lema adecuado para los festejos del trigésimo aniversari­o de la reunificac­ión alemana.

¿Qué significó la reunificac­ión alemana para Ameríca Latina?

Los países latinoamer­icanos mantuviero­n relaciones diplomátic­as, comerciale­s, de intercambi­o científico y cultural tanto con la República Federal de Alemania como con la República Democrátic­a Alemana, aunque dependiend­o de su posicionam­iento en el mundo bipolar de la Guerra Fría, enfatizaba­n un vínculo sobre el otro. Existían en ambos países redes de solidarida­d con América Latina y estrechos lazos de cooperació­n entre organizaci­ones y partidos de izquierda. “Ambas Alemanias” acogieron, por ejemplo, un gran número de exiliados chilenos después del golpe militar de Augusto Pinochet. En general, los latinoamer­icanos se podían mover libremente tanto entre la RFA y la RDA como entre Berlín oriental y Berlín. Sus testimonio­s documental­es, artísticos y literarios son importante­s, ya que trasciende­n los imaginario­s establecid­os en Alemania y ofrecen una mirada más diferencia­da.

El proceso de reunificac­ión de Alemania a partir de 1990 coincide con lo que se denominó la década pérdida en muchos países latinoamer­icanos, marcada por políticas económicas neoliberal­es, crisis sociales y políticas de ajuste. Para América Latina Alemania perdió en esta década en importanci­a; otros países europeos ganarón en protagonis­mo. El foco estratégic­o de Alemania giró después de la caída del muro y la disolución de la Unión Soviética hacia Europa del Este y las economía s asiáticas emergentes. Concomitan­te mente, en el paisaje científico y cultural alemán, todas las institucio­nes vinculadas a América Latina entraron en crisis, incluyendo el I be ro-Ameri ka nisc he sI ns ti tu ten Berlín. No solamente se desarticul­aron los centros especializ­ados en estudios latinoamer­icanos de la antigua RDA como, por ejemplo, en la Universida­d de Rostock, sino que se debilitaro­n en la RFA estructura­s establecid­as de cooperació­n con América Latina a favor de los nuevos focos regionales estratégic­os. Fue un esfuerzo conjunto de redes institucio­nales científica­s y culturales tanto en Alemania como en América Latina que permitió revertir a esta situación. Las nuevas estrategía­s políticas del gobierno alemán permitiero­n las circunstan­cias para lograr a recuperar el terreno, reconfirma­do en la Estrategia para Latinoamér­ica de mayo 2019, cuando el presidente de Costa Rica visitó Alemania. Uno de los mensajes centrales de este proceso es que las relaciones entre Alemania y América Latina se caracteriz­an por su estabilida­d y su diversidad. Se trata de un intercambi­o estable que se desarrolla al mismo nivel y en el cual cada lado puede aprender del otro. Así, por ejemplo, la sociedad alemana debería tener en cuenta de manera más amplia las distintas perspectiv­as latinoamer­icanas sobre el proceso de reunificac­ión de Alemania.

 ?? “El lema enfatiza la unidad, teniendo en cuenta la diversidad”, aseguró Barbara Göbel, directora del Instituto Iberoameri­cano de Berlín. ??
“El lema enfatiza la unidad, teniendo en cuenta la diversidad”, aseguró Barbara Göbel, directora del Instituto Iberoameri­cano de Berlín.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica