Conductores cerca de incursionar en la era de vías elevadas y de varios niveles
El tedioso trámite y alto costo de expropiaciones y necesidad de agilizar los proyectos son el origen de esta tendencia en vialidad
Los conductores están cerca de incursionar en la era de carreteras elevadas y de varios niveles en la Gran Área Metropolitana. En estos momentos está en marcha la ruta aérea más larga de la capital y las dos primeras intersecciones de tres niveles del país, como parte del proyecto de Circunvalación Norte.
Además, pronto arrancará la construcción de la primera intersección de cuatro niveles y la tercera de tres pisos, como parte del nuevo corredor vial de 2,8 kilómetros entre Taras y La Lima, en los accesos a Cartago.
Se ha tenido que recurrir a las rutas elevadas ante la necesidad de dar solución a la saturación vial, a la falta de espacio para ampliar las rutas actuales y al alto costo que implicaría expropiar las propiedades que se requieren para ensancharlas.
El desarrollo de infraestructura de varios niveles busca facilitar la movilidad de la ciudadanía con soluciones integrales que incluyen pasos a desnivel y marginales, drenajes, medidas de seguridad vial y soluciones para peatones, destacó Rodolfo Méndez, ministro de Obras Públicas.
Con esa visión se diseñó un camino elevado de 2,25 kilómetros en la fase norte de la carretera de Circunvalación, la cual cruzará tres distritos del cantón de Tibás.
Ese mismo proyecto, a cargo del consorcio Meco-La Estrella por $163 millones, es el que contempla las dos primeras intersecciones de tres niveles.
La más avanzada, con un 90% de construcción, está sobre la ruta 32, cerca del Motel Edén, y servirá para conectar la nueva vía aérea, ubicada en el tercer nivel, con la ruta a Limón, que está en la planta baja. Ambas serán enlazadas por una rotonda que estará en el segundo nivel.
La otra se está construyendo en La Uruca, en la intersección que conecta con Circunvalación y lleva un avance por arriba del 40%.
Esta tiene una complejidad mayor pues incluye un túnel, que será el paso entre la plaza de deportes de La Uruca y la Pozuelo y un paso elevado, que conectará el nuevo paso norte de la Circunvalación con el viejo tramo.
A su vez, el nivel intermedio será una rotonda que conectará los otros dos niveles.
Antes de que concluyan los pasos a desnivel en la Circunvalación, iniciarán dos más a la entrada a Cartago.
El principal será de cuatro pisos y se construirá en La Lima con características especiales e inéditas en el desarrollo de la infraestructura vial del país.
Dicho diseño comprende pasos elevados, inferiores y a nivel, así como intercambios para facilitar la salida y acceso desde las distintas rutas.
Contará con cuatro carriles, dos por sentido, para salir o entrar de la Florencio del Castillo hacia la ruta 10, que es la que lleva al centro de Cartago. Además, tendrá dos carriles elevados, uno por sentido, para mantener el paso continuo sobre la Interamericana Sur.
Cerca de ahí, en Taras, se hará la tercera intersección de tres niveles, que comprende paso elevado, subterráneo y a nivel.
Este plan forma parte de un corredor de 2,8 kilómetros que le fue adjudicado también al consorcio Meco-La Estrella, por casi $60 millones.
Hasta ahora la vialidad nacional no había pasado de dos niveles, en rotondas o pequeños tramos de vía.
El paso hacia obras de mayor impacto se dio con la carretera elevada que une la ruta 32 con la nueva terminal de Moín, que alcanza los 2,3 kilómetros de longitud y que se diseñó así para proteger humedales ubicados en el trayecto.