La República, 70 años de not ariado público
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Los inicios
Nacido en el filo de la segunda mitad del Siglo XX, en el inicio del Gobierno de Otilio Ulate Blanco, 1949-1953, el 1 de noviembre de 1950, el Periódico La República, que cumplió 70 años ayer, irrumpe con los aires de la Segunda República, a su impulso, a la necesidad de construir un partido político nuevo, que no lo tuvo el movimiento político militar triunfador de esa gesta.
Inició sus actividades en el edificio Esquivel, luego Tienda Simón. Si no iba a ser un periódico estrictamente político partidario, sí iba a ser un periódico claramente alineado a una posición ideológica, la socialdemócrata. Al fundarse tuvo una gran oposición de los otros grupos de prensa empresarial y política.
El esfuerzo y la visión política, principalmente de José Figueres, lo llevan a impulsar la creación del Partido Liberación Nacional, el 12 de octubre de 1951, momento a partir del cual, durante los siguientes inmediatos años, el periódico La República se convierte en su principal vocero, sin ser oficialmente un órgano partidario.
Los fundadores
El grupo fundador y director del Periódico La República, aquel 1 de noviembre de 1950, fue la empresa Compañía Editora Costarricense S.A. y su Junta Directiva estaba integrada por Alberto Cañas Escalante, Gerente, Aquiles Bonilla, Presidente, Francisco Jiménez R., Vicepresidente, Mario Quirós, Tesorero, Marcial Aguiluz Orellana, Roberto Fernández Durán, Rodolfo Hernández, que atendía los servicios cablegráficos de la International News Service, y Edmundo Woodbridge en la parte comercial del periódico. A los ocho días de fundado se integra en su Junta Gonzalo Facio Segreda, como secretario.
Este grupo tenía claro que, si aspiraban a desarrollar un movimiento político de largo alcance, como lo fue luego la fundación del Partido Liberación Nacional, necesitaban un medio informativo que les proyectara.
Ya un grupo de figueristas había intentado comprar en 1950 las acciones del periódico
La Nación, sin éxito, propuesta de Francisco Orlich Bolmarcich. Sin dinero para comprar las propias máquinas impresoras, al inicio, Andrés Borrasé, de la Prensa Libre, les facilitó la suyas para su labor editorial con La República.
En octubre de 1951 la empresa compró la vieja maquinaria y el local que tenía el periódico La Tribuna, que estaba donde está el negocio conocido como La Gran Vía, cerca del Parque Morazán, donde estuvo La República por diez años, editando alrededor de 9 mil ejemplares diarios.
El nombre de La República lo hereda por influencia de Aquileo J. Echeverría quien había dirigido otro periódico La República, memoria que se quería exaltar y conservar.
Siempre destacado
De ellos, Alberto Cañas Escalante fue el primer director del periódico, uno de los intelectuales y periodistas de más larga trayectoria nacional, quien también fue el primer Director de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Costa Rica, desde entonces al periódico se le dio una orientación enfocada a los asuntos económicos y financieros.
Alberto Cañas Escalante, como su primer director, cambió el formato del diario de estándar a tabloide, como se conoce hasta hoy, e introdujo, como innovaciones, una página de columnistas permanentes, una sección de críticas de cine y teatro, así como un suplemento sobre literatura y poesía.
En ese período apoyó el periódico La República la nacionalización bancaria, la creación del ICE y el INVU, así como las políticas institucionales, que empezaban a cobrar forma, impulsadas por la Junta de Gobierno.
De los sesentas a los noventas
Al inicio de la década de 1960 el periódico La República dejó de “pertenecer” al Partido Liberación Nacional, despolitizándose del mismo, para convertirse más en un medio de información general, no tendencialmente partidario, abriendo sus puertas de trabajo y de publicación a jóvenes, escritores, intelectuales, exiliados, particularmente venezolanos, como colaboradores en la década de 1950-1960.
En 1966 don Pepe Figueres vendió el periódico al señor Rodrigo Madrigal Nieto.
En los años 70, La República fue el primer periódico costarricense en utilizar color en su impresión y trabajar con la batería de levantado de textos “Compugraphic”.
A inicios de la década de 1990 el periódico sufrió una gran reestructuración, en el ámbito interno como en el externo, incluso bajo la coordinación y propiedad del sector cooperativo, y en 1994 fue adquirido por el grupo empresarial Hollinger, que en ese momento era la tercera editorial de periódicos del mundo, con presencia en Canadá, Estados Unidos, Inglaterra e Israel, una organización independiente, dedicada exclusivamente al periodismo, que otorga libertad editorial a cada una de sus publicaciones.
Una nueva La República
Desde el año 2000, La República, se ha convertido en el diario de negocios de Costa Rica cubriendo siempre los temas de desarrollo social, de cultura, entretenimiento, deportes y de política, especialmente nacional, ampliando sus servicios a suscriptores ejecutivos y profesionales, inversionistas, contribuyendo a que sus lectores se capaciten en las áreas de finanzas, títulos valores, bienes raíces y otro tipo de inversiones, así como con la edición de Bloomberg, con una cobertura del acontecer empresarial mundial.
En el 2007, el Grupo Hollinger vendió el 100% del periódico La República a un grupo de socios locales, haciendo que el negocio evolucionara de forma aún más dinámica, convirtiéndose La República en la República Media Group (RMG), con nuevos productos y servicios, como la revista mensual Estilo Ejecutivo; la Casa Ideal, el Código Salud, Motores Elite y otros suplementos.
En el 2008 RMG se proyectó a nivel mundial, con el lanzamiento del dinámico portal de negocios: www.centralamericaLINK.com.
Formadora de líderes
En el balance de los setenta años del periódico La República podemos concluir que ha sido una gran Escuela de formación de periodistas, junto a los grandes periodistas que pasaron por sus páginas, Alberto Cañas Escalante, Julio Suñol Leal, Rodrigo Madrigal Nieto, Joaquín Vargas Gené, Julio Rodríguez Bolaños, y los extranjeros Carlos Andrés Pérez, Mario García Arrocha, Armando Freites León, Alberto Ferreyros. También otros nacionales como Gaetano Pandolfo Rímolo, Leví Vega Martínez.
Entre sus caricaturistas destacaron Hugo Díaz, que fue hasta el año 2000, el funcionario más antiguo que tenía el periódico La República, Miguel Ángel Agüero Brenes, conocido cariñosamente como “El Machaco” por su página de humor diaria La Machaca le siguió, este incluso siguió trabajando en la redacción hasta sus últimos días de vida a mediados del año pasado, en la actualidad la sala de redacción fue bautizada en su honor.