NOTA DE TANO
¿FINALES SOÑADAS? NO. SOLO EN COPA AMÉRICA
El papel aguanta lo que le pongan y, lo que le escriben encima, queda impreso.
Entonces, es imposible “quitarse el tiro” de lo escrito.
Este fin de semana se juegan las finales de la Copa América y de la Eurocopa.
La primera, presenta la final soñada: Brasil frente a Argentina. La Eurocopa no.
Y decimos que no, porque la selección de Italia no estaba invitada por los “entendidos” a la fiesta. Repasen los vaticinios de la prensa deportiva, previo al inicio de la competencia.
Estas eran por su orden, las selecciones favoritas para ganar la Eurocopa, y así está escrito.
Francia, campeona del mundo; Bélgica, número uno en el ránking mundial de FIFA; Alemania, siempre favorita, potente y peligrosa; la Portugal de Cristiano Ronaldo, campeona defensora. Y después de estos cuatro favoritos, en orden descendente: Inglaterra, España, Holanda y de octavo Italia. Revisen los periódicos.
Fanático que soy de la “Azurra”, por razones de sangre, siempre toco el tema porque a quienes seguimos apasionadamente a la Nazionale, no deja de sorprendernos, el menosprecio de la prensa deportiva mundial hacia la tetracampeona del mundo.
La Selección de Italia en esta Eurocopa, tuvo que irse ganando el rol de favorita juego a juego, partido por partido, dado que mis colegas, desconocedores de la ruta del equipo de Roberto Mancini, todavía nos hablaban del “catenaccio” y de la eliminación de la “azurra” al Mundial de Rusia 18.
Ignoraron, suponemos que de forma adrede, que Italia ganó los ocho partidos del Grupo J, para clasificarse invicta a la Euro y que sumaba la friolera de 28 partidos sin conocer la derrota. Ahora lleva 33. ¿Cómo un seleccionado con este impresionante récord, no fue señalado como favorito para ganar la Eurocopa?.
Eso, como decía el recordado Parmenio Medina, que se lo pregunten a la abuela de Manuel.
Final soñada en Copa América; Neymar vs Messi, la estrella argentina dándolo todo y “matándose” en la cancha para darle a su país un trofeo grande, uniformado como el mejor jugador del mundo.
En el Viejo Continente, no hay final soñada; la prensa quería un Francia-Alemania o un Bélgica-Portugal, pero se “colaron” dos intrusos: la siempre desvalorada Italia, practicando un fútbol vistoso y de alto nivel, ante la Inglaterra de
Harry Kane, con solo un gol en contra en el torneo, dispuesta a ganar la Eurocopa por primera vez en su historia. La “azurra” la conquistó en 1968.