LOS CUATRO GRANDES DEBEN JUGAR LA LIGA PRÉMIER
Nuestro campeonato no se puede jugar como los de Europa, porque no existe el regionalismo. Alajuelense visita Grecia y el 90% de los espectadores son de la Liga, igual Saprissa en Guápiles o Herediano en Guadalupe. Un campeonato así sería justo pero no rentable.
Nuestros dirigentes deben meter presión y competencia a todas las posiciones del torneo y evitar que varios equipos vegeten en el desarrollo del certamen.
Me parece que es hora de separar a los cuatro grandes, del resto de competidores.
Saprissa, Herediano, Cartaginés y Alajuelense, deben integrar una Liga Premier y enfrentarse entre ellos a cuatro vueltas, todos contra todos, incluso en jornadas de doble programación. Un preliminar
Saprissa vs Cartaginés y estelar Herediano- Liga, rotando las sedes. Llenazos asegurados.
La Liga Prémier queda obligada de entregar un porcentaje de sus ingresos por taquilla a las otras Ligas.
Como este asunto apenas comienza, si uno de los cuatro grandes al final de este Clausura, ocupa una posición inferior al cuarto lugar, siempre juega la Prémier. Igual, si Puntarenas, Sporting o Santos queda campeón nacional, juega en la Liga A. Es injusto pero hay que arrancar de alguna forma.
Un solo torneo por año y de esta Liga Prémier sale el campeón nacional, pero el equipo que ocupe el cuarto lugar al final de las cuatro vueltas, desciende a la Liga A, formada por los cinco equipos que ocuparon las posiciones de 5 a 9 al final de este Clausura.
Estos cinco equipos juegan un campeonato aparte, que puede ser a tres vueltas. También podrían ser preliminares de la Prémier.
Quien lo gana, asciende a la Liga Prémier y así puede disputar el título de campeón y el que ocupe el último lugar, desciende a un torneo de solo tres equipos, (posiciones 10-11 y 12) con el descenso de dos de ellos a la segunda división.
A esta “liguilla” entre tres equipos habrá que buscarle un formato de competencia especial. El equipo que la gana asciende a la Liga A y los otros dos descienden a segunda división.
En este Clausura que recién se inicia va a descender un equipo. El campeón de segunda división entra entonces directo a jugar la “liguilla”.
Esta es una simple sugerencia del columnista, un aporte que busca meterle presión y competencia al campeonato en tres zonas diferentes de la clasificación.