¿Cómo construir un fondo de emergencias sin comprometer su estabilidad financiera?
Este dinero es diferente al ahorro y se debe establecer un monto distinto para cada uno
Contar con un fondo de emergencias puede marcar la diferente ante situaciones inesperadas, ya que sirve de salvavidas para salir de la urgencia sin afectar sus finanzas.
Y es que, un fondo de emergencia no es lo mismo que el ahorro, pues está destinado a cubrir gastos imprevistos, mientras que el ahorro se destina a metas específicas.
“El monto del fondo de emergencias varía de acuerdo con el estilo de vida de cada persona, se recomienda contar con un respaldo de entre 3 y 6 meses de gastos y cada cierto tiempo ajustar esta cifra según las necesidades que puedan surgir”, explicó Rebeca Fernández, experta en Educación Financiera de Grupo Mutual.
Aunque puede parecer una meta desafiante, programar contribuciones regulares, incluso por quincena, facilita la creación progresiva de este fondo vital.
Otra recomendación es que este dinero para gastos extraordinarios debe estar resguardado de manera independiente a otros ahorros, en una cuenta que genere intereses y no lo penalice por retirar cuando lo necesite.
Para construir con éxito este colchón financiero, la clave está en la planificación y en contribuciones regulares que le permitan mantenerlo y enfrentar imprevistos con mayor tranquilidad y seguridad económica.
Algunas situaciones en los que se puede recurrir al uso de un fondo de emergencia son: ¿Cuándo usar el fondo de emergencias?
• Gastos médicos: Enfermedades graves, cirugías o accidentes
• Pérdida de empleo: Para cubrir gastos básicos mientras se busca otro trabajo
• Desastres naturales o pandemias: Para recuperarse después de situaciones catastróficas
• Reparaciones importantes: Reparación de vehículos o de la vivienda