TAXISTAS ENJACHAN A CHOFERES CON BUENAS NAVES UBER JALA BRONCAS
normal como que una mamá decida irse en los asientos traseros del carro para acompañar a su bebé podría ser un peligro, aunque parezca mentira.
Resulta que un detalle como ese, tener un carro del año o bien cuidado, motiva a algunos taxistas rojos o piratas a confundir a choferes comunes y corrientes con gente que bretea para Uber.
Esa exper le ocurrió a Andrés Mora, un chofer que hace poco compró su carrito del año, tras varios años de esfuerzo y al que un taxista rojo casi lo mete en un problemón, sin tener vela en el entierro.
Mora, quien es periodista, comentó que el pasado 26 de agosto le armaron la bronca porque su esposa decidió ir en el asiento de atrás para acompañar a una sobrinita. Esa acción le costó un momento lleno de tensión por culpa de un taxista enfurecido.
Según el comunicador, cuando el taxista vio que él andaba carrito nuevo y que llevaba a una muchacha atrás, lo empezó a insultar.
“Me empezó a gritar que yo era un muerto de hambre porque pensó que era un Uber, la situación fue bastante incómoda porque no sabía si nos iba a hacer algo”, contó Andrés.
Mora dice que tragó grueso y trató de no darle pelota al taxista porque le dio miedo que el señor se pusiera más violento.
Aunque parezca mentira, parece que lo que le ocurrió a Mora esmucho más común de la cuenta.
La Teja pudo hablar con don José Ulises Navarro, quien es vecino deTres Ríos, al que también lo enjacharon dos taxistas.
Navarro contó que casi se gana una bronca solo por tener un carrito bien cuidado.
Navarro fue perseguido e in- sultado por dos taxistas piratas, solamente porque se les metió entre ceja y ceja que él que era un Uber.
Navarro tiene un Toyota Yaris 2008 y el pasado domingo 27 de agosto llevó a su hijo a la casa de un compañero para que hiciera un trabajo de la universidad.
Cuando iba por La Aurora de Heredia, de regreso a sucasa, a eso de las 7 a. m., dos porteadores se le pusieron al corte y en un semáforo le atravesaron las naves.
Los dos sujetos lo comenzaron a insultar.
Navarro, quien es expolicía, dice que cuando vio que la cosa se puso fea lo primero que acató a hacer fue huir del lugar, pero como no vive por ahí casi no conoce la ruta.
En su desesperado intento por escapar se metió en una calle contravía y casi choca a otro carro que venía de frente, pero salió bien librado.
La Teja quiso saber la posición oficial de los taxis rojos sobre el tema, así que el dirigente Rubén Vargas respondió que él no cree que esas cosas sean ciertas, más bien dice que son parte de una campaña de Uber en contra los miembros de su gremio.
“Esto es algo falso, todos estos son montajes pagados por la gente de la plataforma privada”.
Sin embargo, cuando le contamos que uno de los casos era de uno de los compañeros que trabaja en La Teja dijo que ese podría ser una excepción a la re
gla.