Voz de Dios impidió venganza
PAPÁ ESTUVO A PUNTO DE MATAR A ASESINOS DE SU HIJO
que don William McDonald sintió por el asesinato de su hijoKenny Bryan Mc Donald Hills, de 26 años, lo llevó a prepararse para una “dulce” venganza: matar a quienes le arrebatarona quien él más amaba, pero ese día una voz le dijo que no lo hiciera. Para don William fue Dios quien le habló.
Este limonense reconoce que pese a todo el esfuerzo que hizo, su hijo se perdió en el camino y el 7 de febrero del 2012 fue de- capitado, desmembrado, lo metieron en trampas para pescar langostas y lo lanzaron al mar en las costas frente a Limón. Los dos hombres que lo mataron fueron sentenciados. Aunque el cuerpo no apareció, hubo un vídeo en el que grabaron toda la maldad que le hicieron a Kenny. Don William confesó, cinco años, después que por el dolor se empezó a envenenar de odio y decidió vengar la muerte de su hijo. Varios amigos del joven le iban a ayudar, y todo quedó preparado para dos días después del brutal asesinato.
“Los muchachos estaban dispuestos a rafaguearles la casa, entrar ymatarlos. Yo iba a participar en eso, pero ese día me fui para el patio de la casa y empecé a conversar con Dios para pedirle fortaleza para cumplir con éxito”, recordó don William.
“Hablaba con el Señor, yo le decía que me había ayudado de salir de situaciones difíciles, y ahora necesitaba que me respaldara. Ellos tocaron mi sangre y ahora lo que yo necesito es que me des esa fuerza”.
Según relató Delfina, ese día es- taba en la casa orando sin saber lo que su esposo estaba por hacer, pero hubo una señal divina.
“En un momento escuché una voz que me dijo: la vengaza es mía, volví a ver a mis alrededores y no había nadie, el tono de la voz fue claro. Lo sucedido me sorprendió pero no me asustó, lo interpreté como una llamada salvadora.
“Corrí y caí de rodillas a la par de un palo de coco donde comencé a llorar sin parar y decidí dejar todo en manos de Dios”, narró el papá.
Los amigos de su hijo llegaron por él y todos fueron a un lugar donde les iban a dar las armas que usarían. En el transcurso del viaje, que duró unos cinco minutos, experimentó un cambio total de ánimo, la irá se había ido y sentía paz.
“Al llegar les dije que ya no iba a vengar la muerte de mi hijo porque todo lo había dejado en manos de Dios. Los muchachos me trataron de cobarde, que no tenía la valentía de Kenny”, recordó.
Después se fueron a un lugar donde ultimarían los detalles.
“Yo continuaba intentando convencerlos de dejar las cosas tal y como estaban.
“Les insistí, disculpen hijos, decidí dejar esto en manos de Dios. Ellos se voltearon a verme y me dijeron si usted no quiere ir no vaya”, recordó el limonense.
Don William les dijo a los muchachos que si insistían iba a llamar a la Policía, que él como papá iba olvidarse de la venganza y que ellos lo podían hacer.
“Me dejaron botado y cuando me di cuenta llegué caminando al centro de Limón.
“Eran como las 2 de la mañana. Untaxista quemeconocía se ofreció a llevarme a la casa y fue cuando me di cuenta que aún andaba armado con una nuevemilímetros”, recordó el papá.
Meses después, apareció el testigo clave para la Fiscalía: Carlos Potoy, hermano del dueño de la lancha en que viajaron la víctima y los asesinos. Potoy narró que los asesinos le enseñaron el video y él no pudo terminar de verlo.
Dos hermanos de apellido Jiménez, uno de ellos alías “Pechán”, fue quien grabó con el celu y otro de apellido Rodríguez, alías “Chichí”, fueron condenados a 35 años de prisión.
La angustia de McDonaldvolvió esta semana cuando Pechán pidió que le rebajen 20 años de la pena pero por la ausencia de su abogado el estudio de la petición se pospuso para diciembre.
La familia del joven asesinado asegura que lo que más les duele es no saber dónde quedaron los restos de Kenny.
“Esto es sumamente difícil. Los años pasan y, nosotros como padres intentamos olvidar lo ocurrido, pero primero es la muerte de un hijo, segundo la manera en que lo mataron y no poderlo enterrar, complica todo”, dijo el angustiado papá.
A veces hasta tienen la esperanza de que algún día llegue y les toque la puerta.