Gradas peladas llenas de castigo
en las gradas del estadio de Balaídos le costó una sanción económica al Real Club Celta.
La Liga de Fútbol Profesional (LFP), de España, le ha comunicado al equipo que en las capturas de imagen realizadas y correspondientes a los dos primeros partidos de Liga jugados esta temporada como local no se cubrió el mínimo del 70 por ciento de la capacidad en las gradas de tribuna alta y baja.
Eso era exigido para evitar el castigo económico.
Oficialmente, el Celta-Real Sociedad fue presenciado por 16.961 espectadores, mientras que el choque contra el Deportivo Alavés fue seguido en directo desde las gradas del estadio por 17.384 personas.
La multa a los infractores está enunos 5.000 (¢3,5 millones) o 6.000 euros (¢4,2 millones) por partido.
Este jueves, los de Unzué regresan a Balaídos y al discreto inicio de temporada, se une la visita de un equipo de no jala gente menos en un día laboral.
La directiva celeste no quiere seguir acumulando multas de la LFP y por eso han rebajado el precio de las entradas para este Celta-Getafe con el fin de aumentar la asistencia.
Los hechos demuestran que el Celta ha tardado en reaccionar para cumplir la normativa vigente desde la temporada pasada.
Las cámaras de televisión están colocadas en la grada de Río por lo que la imagen de cámara afecta a tribuna alta y baja, las dos zonas del estadio que están obligadas a dejar menos campos vacíos.