Renace la Ciudad del Lodo
LECCIÓN BRUMOSA
Hay una famosa frase que dice: “El que no conoce la historia está condenado a repetirla”. Y esto les pasó a los vecinos de los condominios que están entre El Tejar y Tobosi, en El Guarco de Cartago.
Las inundaciones que han afectado la Vieja Metrópoli en las últimas semanas se encargaron de revivir el apodo con el que se conocía a la provincia hace 454 años.
Resulta que en 1563 Juan Vásquez de Coronado fundó Cartago, la primer provincia de Costa Rica, en un lugar que pasaba inundándose por lo que se le conoció popularmente como la Ciudad del Lodo.
Aquella histórica ciudad estaba donde ahora se llama Barranca, unpueblo que queda en-tre El Tejar y Tobosi, precisamente donde están loscondomi- nios La Rueda, Hacienda y Nobleza de Coris, que están sufriendo con las inundaciones.
Por eso, fue inevitable acordarse del sobrenombre de la que fuera la primera ciudad del país ahora que ha pasa inundándose por culpa de las fuertes lluvias.
Según el historiador brumoso Franco Fernández, el motivo por el que esta primera ciudad se pasaba inundando era porque está cerca de la reunión de dos importantes ríos que cuando se juntan hacen loco.
“Cuando el río Coris se crece y se junta con el río Puriris, ambos no pueden desembocar por lo que las aguas empiezan a levantarse en esta zona y por esa misma unión se inundaba a cada rato Cartago, por eso fue necesario trasladar la ciudad”, contó Fernández.
El historiador detalló que la Ciudad del Lodo duró si acaso cinco años, cuando decidieron pasarla para Mata Redonda (San José, donde está hoy La Sabana) porque ya el problema con el agua era insoportable. En 1575, la ciudad se volvió a trasladar para el lugar donde está actualmente Cartago.
La primera ciudad de Costa Rica era pequeña, vivían unas 500 personas y lo único que tenía era la plaza central, la iglesia, el cabildo, la cárcel, la casa del gobernador y algunos comercios pequeños alrededor; por lo que si los ríos se crecían arrasaban con todo.
“Eso es como un gran llano, es un lugar muy plano para el desarrollo de una ciudad, es una zona inundable históricamente desde que se fundó Cartago”, añadió Fernández.
En el punto exacto donde se fundó Cartago ahora hay una bodega abandonada y queda una piedra que en algún momento fue un monumento.
Vecinos advirtieron. Doña Guiselle Fuentes es vecina del residencial La Rueda, uno de los lugares afectados por las inunda- ciones. Fuentes dice que, sin embargo, en los dos años que tiene de vivir en este lugar, es la primera vez que se les inunda la casa y a sus vecinos, por lo que para ella que la Ciudad de el Lodo haya despertado es culpa de la Muni.
“Esto se dio por un descuido de la municipalidad porque se les avisó de la situación e hicieron orejas sordas y hastaque pasó actuaron, si ellos no drenan los ríos tarde o temprano se van a salir”, dijo la afectada.
La Teja conversó con Víctor Arias, alcalde de la Muni de El Guarco para saber si los lugares que se inundaron contaban con los estudios necesarios para construir de forma segura.
Arias argumentó que absolutamente todas las construcciones actuales y las que vienen a futuro en la que fue la Ciudad de el Lodo tienen los respectivos estudios por lo que no hay problema en desarrollar ahí.
Además, dijo que ellos vienen realizando cerca de 100 a 200 horas de maquinaria al mes en los ríos Puris y Coriris para evitar que se salgan.
“En realidad, como le digo, posibilidades hay de que por cualquier eventualidad cualquier terreno se puede inundar, pero habría que ver cuando se presenten los nuevos proyectos, porque el que hay actualmente en la zona nuestra no se han inundado”, dijo Arias.
¿Y el hospi? El futuro nuevo hospital de Cartago ya tiene el terreno listo y no se escaparía de esta situación que acongoja a la Ciudad del Lodo.
El terreno que compró la Caja para el nuevo centro médico brumoso podría presentar problemas de inundaciones.
El nuevo hospital estaría teniendo un costo cercano a los ¢73.000 millones y el terreno donde se va a construir está frente al Riteve en El Guarco.
La Teja intentó conversar con los responsables de la compra del terreno por parte de la Caja, pero nos dijeron que no nos podían atender por la emergencia que estaba viviendo el país con la tormenta Nate.
Una de las personas que ha estado más preocupada por este tema es el diputado Mario Redondo, quien asegura que aún no está convencido de que ese sea el mejor lugar.
“Nos han convencido, siempre manifestamos que nos dieron pruebas claras de que no hay riesgos en el terreno, pero siempre sostuvimos la duda porque las aclaraciones no fueron contundentes y pedimos una comisión interinstitucional que nos han dichoque sí, pero luego nos cancelan”, enfatizó Redondo.