Jama para dormir como un bebé
TOMATE, HUEVOS, ATÚN, CARNES ROJAS Y EMBUTIDOS LO DESVELAN
espinacas por su parte son altas en ácido fólico y calcio, que favorecen la síntesis de serotonina y ayuda a regular el sueño. Eso sí, deben comerse preferiblemente en ensaladas”, explicó la nutricionista española.
Y para los amantes de la papa, su alto contenido en potasio, calcio y magnesio, ayudan a relajarse.
La cebo- to contrario y más bien le va a dar insonmio y menos si le arrima unos huevitos con tomate, ahí si es cierto que no pega los ojos en toda la noche.
Esto no quiere decir que debe hacerle la cruz a esos alimentos, solo que debe escoger mejor la hora del día en que se los come. Así en dos platos, en la cena coma
los alimentos gorgonzola, embutidos como la mortadela, peperoni, salami o salchicha.
Otras comidas que mejor dejar para el día son el atún, sardinas y el tomate.
El perejil, la menta o las comidas cargadas de grasa pueden producir ganas de orinar, gases o reflujos que no lo dejarán descansar plácidamente.
“Tampoco hay que especiar mucho los alimentos consumidos durante la última comida del día, ya que activan el jugo gástrico en el estómago y dificultan el sueño por molestias digestivas y por un aumento de la temperatura corporal”, asegura la nutricionista.
Asimismo, investigaciones del Instituto de Nutrición Humana de la Universidad de Columbia, en Nueva York, muestran que las comilonas cargadas de grasas saturadas y azúcares se asocian a sueños ligeros, menos reparadores y con más interrupciones.
“Algo similar sucede con el alcohol, que en principio parece que produce cierta sedación, pero da un sueño más liviano”, destaca Aguilar.