Dieta e impotencia

La dieta tradicional del costarricense tiene un alto contenido calórico.

Hoy grandes grupos de nuestra población tienen trabajos físicamente poco demandantes, con el agravante que consumen aquellas dietas tradicionales. Esto, aunado a la poca práctica del ejercicio, condiciona que cerca de la mitad de la población sufra problema de sobrepeso.

Ese exceso de grasa se acumula también en los vasos sanguíneos y la grasa en las arterias provoca que llegue menos sangre a los diferentes órganos afectando su funcionamiento.

Entre esos órganos sobresalen el corazón y el cerebro, esto explica porque la obesidad predispone a enfermedades tan serias como el infarto cardiaco y el derrame cerebral. De igual manera en los órganos sexuales y específicamente en el pene, la disminución de la cantidad de sangre provoca problemas serios y reiterados para conseguir y mantener la erección.

Los problemas de impotencia son cada vez más frecuentes. Esto se debe a que cada vez más personas son sedentarias, no realizan ninguna actividad física significativa y porque además asumen dietas ricas en grasas y calorías. Además, estos problemas sexuales se están presentando cada vez más temprano. Por eso mantener el peso, cuidar la dieta, evitar las grasas, consumir muchas frutas, legumbres, verduras e ingerir bastante líquidos, sobre todo agua, son claves para prevenir fallas en el rendimiento sexual.

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