Bestia en el banquillo
INVENTOR USÓ SU CREATIVIDAD PARA MATAR A PERIODISTA EN UN SUBMARINO
pidieron este lunes las autoridades danesas para Peter Madsen, juzgado por el asesinato “bestial” en su submarino de la periodista sueca Kim Wall, cuyo cuerpo fue encontrado en el mar, desmembrado y mutilado.
El atroz crimen ocurrió en agosto del 2017.
El veredicto podría darse a conocer mañana en este juicio único en la historia judicial danesa por la escena del crimen -un submarino-, y la personalidad de sus protagonistas: un famoso inventor y autodidacta en su país, creador de cohetes y sumergibles, y una joven periodista de 30 años que iba a entrevistarlo.
La acusación del fiscal, Jakob Buch-Jepsen, y el alegato de la abogada de la defensa, Betina Hald Engmark, quien dice que fue un accidente, echan el cierre a 11 días de largas audiencias en que se han descubierto las fantasías oscuras del acusado, llenas de relaciones sexuales violentas, mujeres torturadas, degolladas o decapitadas.
“Pervertido polimorfo”, presentando “un riesgo elevado” de reincidencia según los psiquiatras, “Peter Madsen pensaba llevar a cabo el crimen perfecto haciendo desaparecer el cuerpo descuartizado de su víctima en la bahía de Køge”, cerca de Copenhague, afirmó el fiscal.
Enfermazo sexual. “Tenía un plan criminal ideal, como le confesó a una amiga en un mensaje de texto (...). Nohay lugar a dudas” en este caso, continuó reclamando la cadena perpetua, que realmente en Dinamarca equivale a 16 años de cárcel.
Si bien faltan pruebas materiales irrefutables en el caso, el magistrado llamó a los miembros de la corte (un juez profesional y dos jurados) a confiar en “su sentido co- mún”, y condenar a Peter Madsen por asesinato, abuso sexual agravado y daño a la integridad de cadáver. El acusado, de 47 años, ha ofrecido tres versiones diferentes de los hechos desde la desaparición de Kim Wall, el 10 de agosto de 2017, y su arresto al día siguiente de su partida al mar.
Después de afirmar que la desembarcó el día 10enCopenhague, dijo a los investigadores que había muerto accidentalmente al golpearse la cabeza con la escotilla. Negado por la autopsia tras el examende la cabeza en octubre, explicó que había sucumbido a los gases tóxicos liberados durante una des- presurización repentina en el submarino.
Esta última versión es también la que ha defendido en su proceso.
La acusación se basó en la autopsia, los hallazgos técnicos en el submarino y el contenido de la computadora de Peter Madsen para reconstruir el escenario criminal. La autopsia evidenció 14 heridas en la zona de los órganos genitales de la víctima que, según el fiscal, prueban la naturaleza sexual del crimen.
Degüello o ahogo. Las causas de la muerte no han podido ser determinadas al 100%, pero los pulmones de Kim Wall presentan las características de una “asfixia mecánica” producida por degüello o ahogo.
Los brazos de la periodista presentan también marcas que co- rresponden al diseño de las correas encontradas en el submarino, que sirvieron para amarrarla durante su tortura, según la acusación.
Para el fiscal Jacob Buch-Jepsen la personalidad de Peter Madsen refrenda su crimen, recordando este lunes que, unas horas antes de los hechos, el acusado realizó en internet una búsqueda por medio de las palabras clave “mujer”, “decapitación”, “agonía”.
Una simple “coincidencia” para el acusado.
La corte ha analizado videos y películas de animación encontradas en el disco duro de la computadora del acusado, en las cuales las mujeres son empaladas, ahorcadas o decapitadas.
“No es sexual. Miro esos videos para llorar y sentir emociones”, se defendió Madsen ante los jueces.